Doña Petrona: cocinera, hacedora y emprendedora

Doña Petrona: cocinera, hacedora y emprendedora

Su libro de recetas lleva más de cien ediciones. Petrona C. de Gandulfo es un caso atípico que la socióloga Andrea Matallana registró a la perfección en su libro “Delicias y sabores – Desde Doña Petrona hasta nuestros días”. La autora afirma: “Hoy hay muchos nichos para cocineros en televisión, pero no hay ninguna reina como era ella”.

La investigadora empezó analizando los menús de Doña Petrona desde un punto de vista económico y quedó prendada de la magia de esta hacedora. Matallana destaca lo extraña y tradicional que fue a la vez la figura mediática de Petrona, ciertos detalles de su vida que permiten contar la historia de una clase social en ascenso. Señala: “Siempre tenía esta cosa de decir ‘yo no sabía hacer nada, no sabía cocinar, y miren ustedes, aprendí, lo hice, lo vendí y ahora soy la reina de la cocina’”.

Orígenes

Petrona Carrizo nació el miércoles 29 de junio de 1898 en La Banda, Santiago del Estero. Su infancia transcurrió en la capital santiagueña junto a sus padres y hermanos. Su madre le enseñó a cocinar, comenzando con un postre de hojaldre.​ Trabajó como cocinera en la estancia Quebrachitos, allí conoció a Atilio Gandulfo, administrador del establecimiento, con quien se casaría tiempo después.
La pareja emigró a Buenos Aires en busca de oportunidades, Gandulfo consiguió trabajo en el Correo Argentino. Como la platita no alcanzaba, decidió trabajar ella. Así consiguió trabajo en la Compañía Primitiva de Gas para enseñar a usar las nuevas cocinas a gas que, en esa época, era el artefacto doméstico más demandado en las casas argentinas.​

El gas llegaba a Buenos Aires como una total novedad y la compañía quería convencer a los argentinos de dejar de lado a las antiguas cocinas de leña. Para llevar adelante esta campaña se presentó Petrona; ella no solamente demostraba cómo funcionaban las nuevas cocinas. Promovió la cocina primero a través de las nuevas cocinas a gas, más tarde a través de clases presenciales, para luego empezar a publicar sus inolvidables recetas en la revista «El Hogar».

Etapa mediática 

Comenzó a incursionar en los medios, empezó en radio Argentina donde tenía una participación diaria; después pasó a radio Excelsior y luego a radio El Mundo. La radio la llevó a la fama.

En 1933 hace un recetario largo, de varios cientos de páginas. No logra llegar a un acuerdo con un editor. No se amilana: decide imprimirlo por su cuenta y venderlo desde su casa. Así se editó «El Libro de doña Petrona», enciclopedia culinaria con secretos y consejos para la mujer moderna como organización del hogar y tareas de mantenimiento.
Fue traducido a varios idiomas, incluido el ruso; fue editado más de cien veces, y continúa disponible en las librerías argentinas.

Junto a su inseparable asistente Juanita.

De ecónoma a cocinera: una todo terreno

A poco de llegada a Buenos Aires, recuerda el libro de Matallana, Petrona empezó a trabajar para la Compañía Primitiva de Gas – CPG,  como parte del equipo de ecónomas, capacitadas en la academia Cordon Bleu porteña. Su misión era la de cocinar en público para demostrar las ventajas de la cocina a gas, novedad modernísima que recién llegaba a los hogares.
La CPG publicitaba sus servicios sirviéndose de la multimediática Petrona, quien en breve pasaría a forma parte de todas las cocinas, con sus recetas que llegarían por radio, TV, o en su libro de 102 ediciones, presente en infinidad de hogares.

Fuente: https://www.utdt.edu/ver_nota_prensa.php?id_nota_prensa=11031&id_item_menu=6

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