Se necesita financiar el desarrollo de un sistema de ferrocarriles que conecten la región. Uruguay lidera un Grupo de Trabajo que ha realizado estudios.
No es suficiente producir bienes, éstos deben ser luego transportados a los lugares donde serán comercializados. El costo de este flete puede incidir notablemente sobre el precio final del producto y esto también puede depender de la modalidad de su transporte. Utilizar trenes supone desplazar una gran cantidad de bienes, evitando recurrir al transporte sobre ruedas, más contaminante y fuente de atascamientos en las rutas.
Por otra parte, si esto vale en el plano del comercio interno, entre países tiene todavía más importancia. Sin embargo, América latina se caracteriza por la ausencia, casi total, de una red ferroviaria entre países, lo que dificulta el desarrollo del comercio y la integración regional.
Es teniendo en cuenta estos elementos que el Ministerio de Transporte y Obras Públicas de Uruguay coordinó la elaboración de un estudio técnico para abordar el tema de la integración ferroviaria en América del Sur. El resultado es el punto de partida para el análisis político-estratégico y económico sobre la mejor forma de avanzar hacia una mayor participación del ferrocarril en el sistema de transporte de carga a nivel de toda la región. Este medio de transporte es una de las alternativas más adecuadas para conectar zonas de producción con los centros de consumo y con las terminales portuarias, dado su mejor desempeño por la mayor capacidad de carga y la mayor eficiencia en el consumo de energía.
Según el Sistema de Información de Proyectos de Cosiplan, en la actualidad existen 43 proyectos del modo ferroviario en desarrollo con un monto estimado de 48.135 millones de dólares y se concluyeron 10 obras luego de invertir 3.891 millones de dólares, siendo la gran mayoría tramos ferroviarios de alcance nacional. Bajo la presidencia de Uruguay, los países del Grupo de Trabajo sobre Integración Ferroviaria elaboraron los términos de referencia del estudio y pidieron apoyo a la Secretaría General de Unasur para el financiamiento.
El estudio presenta una descripción de los sistemas ferroviarios nacionales de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay, Perú y Uruguay. Para cada uno se muestra la evolución de la carga transportada en las décadas recientes y con mayor detalle para la última década (2007-2016) identificando la contribución de los diferentes subsistemas. La investigación muestra la evolución ocurrida desde que, alrededor de la década del 90, se inició en la región un proceso de reforma que consistió en la incorporación de empresas privadas a la gestión de este sector. Sin embargo, se solicita a la Unasur intervenir en el desarrollo de proyectos para avanzar hacia una red integrada de sistemas ferroviarios.
