Cada una de nuestras acciones online tiene su impacto ecológico.
Por minuto se envían por el mundo 41 millones de mensajes de Whatsapp, se hacen más de 3,5 millones de búsquedas, se ven más de 400.000 horas de Netflix, se suben 347.000 historias a Instagram, mientras que 70.000 personas aplican a un trabajo en Linkedin.
Internet es un servicio esencial que nos permite comunicarnos, trabajar, informarnos y cualquier otra actividad al alcance de un click. Pero cada una de nuestras acciones online conlleva un (pequeño) costo ambiental por el uso de electricidad que demandan (y las emisiones de dióxido de carbono asociadas a su generación).
Mike Berners Lee se tomó el trabajo de calcular cuánto contamina enviar un mail, por cada envío. Estimó que se liberan 4 gramos de CO2 a la atmósfera, es poco, pero si lo multiplicamos por los 4.500 millones de usuarios de la web, la cifra cambia.
Greenpeace en su informe Clicking Clean, advierte que si internet fuera un país, sería el sexto más contaminante del mundo.
¿Entonces qué debemos hacer? Mientras algunos promueven sucesivas desconexiones por razones de salud, en términos ambientales una solución más realista es lograr que las enormes cantidades de electricidad que consume el sector provengan de fuentes de energía renovables. Los gigantes de la industria Google, Apple, Facebook y Amazon, ya anunciaron ambiciosos compromisos de descarbonización. Sin embargo, todavía son muchas las compañías y los países –entre ellos la Argentina– en donde las principales fuentes de energía siguen siendo fósiles.
Curiosamente, están surgiendo alternativas para proteger el medio ambiente mientras navegamos por la web. Entre los internautas más conscientes gana adeptos Ecosia, un motor de búsqueda similar a Google, pero con una gran diferencia: destina sus ganancias a plantar árboles y mitigar el cambio climático. El objetivo de este inspirador emprendimiento con sede en Berlín es llegar a los mil millones de árboles antes de 2025.
No están lejos: sus usuarios llevan plantados 124 millones de ejemplares, gracias a sus búsquedas en internet.