Francesco, el film del director ruso Evgeny Afineevsky, arranca en una tarde horrenda que retrata una plaza de San Pedro gris. En medio de la lluvia se lo ve solito al Papa Francisco en medio de su bendición Urbi et Orbi del viernes 27 de marzo.
El documental refleja una humanidad que genera desastres, donde la figura del papa como pastor trata de impulsarnos hacia mejores pasturas.
El propio Afineevsky ve a su film como un documental sobre nuestro género humano, donde pone de manifiesto infinidad de conflictos: agresiones al medio ambiente, guerras que provocan migraciones, abusos sexuales que atañen a la iglesia, pero también al mundo del espectáculo. En medio de esta delgada línea retrata la figura del Papa Francisco, como alguien cercano, que ayuda a navegar, e invita a ir mar adentro, aún en medio de la tormenta.
Añade, “Francisco invita a elegir entre ser víctimas del pasado, o protagonistas del presente y el futuro”.
Sincronicidades
El director, que reside en los EEUU, preparó el documental a lo largo de tres años. Francesco se estrenó en el marco de la sección Eventos Especiales del Festival de Cine de Roma, durante la tarde del miércoles 21 de octubre, fecha en la que el director celebró sus 48 años. El obsequio llegará este jueves, en los Jardines del Vaticano, con el Premio Kinéo!
El galardón es otorgado a quienes promueven temas sociales y humanitarios. Será presentado por Rosetta Sannelli, creadora del galardón, quien subraya el valor histórico del film. “Cada viaje del Papa Francisco en las diversas partes del mundo está documentado en la obra de Afineevsky por imágenes y material de crónicas, y revela un auténtico repaso de los acontecimientos de nuestro tiempo”.
El film de dos horas de duración recorre el pensamiento y diversas experiencias de Jorge Bergoglio, a través de sus viajes, o con reportajes a amigos y colaboradores, e incluye encuentros con el Santo Padre. “Me he reunido con él unas cinco veces, siempre en función de su agenda, hemos tenido también dos entrevistas a cámara”, afirma el director, que grabó las últimas secuencias durante la pandemia del pasado mes de junio.
Su documental quiere mostrar al mundo que estamos en un punto en el que debemos reevaluar nuestras acciones, porque “la Humanidad vive una crisis que no es solamente económica y financiera, también es ecológica, educativa, moral y humana”.
Francisco, un pastor cercano
Afineevsky no pretende mostrar a Francisco en el bronce. “A diferencia de la película de Win Wenders, es importante para mi no mostrarlo ni como un papa ni como el rey del universo, sino como una persona humilde: hago esto, intento ayudaros, mostraros los desastres que vosotros, como humanidad estáis haciendo, intentemos dejar de cometer errores, cuidar el medio ambiente, ser hermanos, terminar con el odio”. Son las ideas que motivaron la encíclica “Fratelli Tutti”. “El papa pone su trabajo y sus pensamientos en la encíclica. Yo pongo mi trabajo y mis ideas y mi forma de narrar, en un producto cinematográfico dedicado a nosotros, los que creamos drama y desastres, y a él, a Francisco, que le gusta ir a la línea del frente”.
Con imágenes conmovedoras de sus viajes -como su visita al campo de refugiados de Lesbos- y frases de gran impacto -“quien piensa solo en levantar muros y no puentes no es cristiano”, “no hay santo sin pecado, ni pecador sin futuro”- el cineasta muestra a un hombre “que llora con la Humanidad”.
Una persona capaz de cambiar
“Intento decir a la gente que es importante aprender de nuestros errores, como hace él… un líder y un hombre que no tiene miedo de arrodillarse y decir perdón, me equivoqué”. “Bergoglio, y eso es lo fascinante, sigue abierto a aprender de sus errores, de la gente que le rodea”, afirma. Uno de esos errores, que luego el papa reconoció, es cuando en 2018 no creyó a las víctimas de abusos sexuales por parte de sacerdotes en Chile y les pidió pruebas enfadado, pero poco después pidió perdón, recibió a las víctimas en Roma y exigió la renuncia en bloque de todos los obispos chilenos.
“Solo dos meses después de la cumbre de los abusos de febrero de 2019 se vieron los primeros frutos, la nueva ley vaticana que obliga a denunciarlos y poco después se abolió el secreto pontificio”, subraya Afineevsky, que incluye entre las entrevistas del documental a víctimas de estos abusos, como el activista chileno Juan Carlos Cruz.
Una mirada laica
El director de 48 años, nació en Kazán, creció en Israel y más tarde emigró a los Estados Unidos. Fue nominado al Óscar al mejor documental en 2016 con “Winter on fire: Ukraine’s Fight for Freedom” sobre la revolución del Maidán, y a tres Emmy por “Cries from Syria” en 2017.
“Para mí que no soy católico, que soy judío y nacido como ateo en Rusia, era importante mostrar al mundo que yo, con mi perspectiva no religiosa puedo ver lo que este hombre hace y cómo nos inspira”. Por eso optó por una película “que pueda ser vista por jóvenes y mayores, por diferentes grupos sociales, independientemente de sus convicciones religiosas. Traté de crear una historia cinematográfica que pudiera ser entendida tanto por personas simples, como gente muy formada”.
De allí que la mirada más que abordar cuestiones religiosas haga eje sobre las ideas del papa en los grandes desafíos de nuestro tiempo.
Dos miradas sobre una misma plaza
Curiosamente, la elección del argentino Jorge Bergoglio como papa en marzo de 2013 aparece casi al final del film. “Tradicionalmente, todas las películas sobre el papa empiezan por su nombramiento, pero yo quiero enfatizar que no hago un filme sobre el papa. Precisamente quería señalar el contraste”, empezando con la plaza vacía en junio de 2020, terminando con una plaza abarrotada en marzo de 2013, como para que todos pensemos en que es lo que ha sucedido…
Fuentes:
https://www.vaticannews.va/es/papa/news/2020-10/francisco-el-nuevo-documental-sobre-el-papa.html
