En plena sesión de Diputados, la legisladora Carmen Medel se enteró del asesinato de su hija de 22 años.
La violencia en México no cesa y llegó hasta el Congreso, donde ayer una diputada se enteró durante una sesión de la Cámara Baja del asesinato de su hija de 22 años.
La diputada Carmen Medel fue presa de una crisis nerviosa, algo natural, cuando se enteró que Valeria Cruz Medel, su hija, había sido asesinada en un gimnasio de Ciudad Mendoza, en el estado de Veracruz. La joven, estudiante de medicina, fue víctima de un hombre armado que ingresó en el local y le disparó. En el estado veracruzano los homicidios en lo que va de este año han sido más de mil y en el país ya no van quedando lugares menos expuestos a la violencia que no parece tener freno. Los últimos datos estadísticos indican que en todo el país hay un incremento importante de la violencia. Las muertes violentas han sido más de 22.000 hasta la fecha, al tiempo que se estiman en casi 30.000 los desaparecidos en el país.
La diputada Medel integra la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) del presidente electo, Manuel López Obrador. Desde que el primero de septiembre los nuevos legisladores asumieron sus bancas, el MORENA tiene mayoría en el Congreso, desplazando a los partidos más tradicionales, como el PRI y el PAN, perdedores de las elecciones que marcaron el triunfo de Obrador, se ha respirado un clima de polarización que ayer tuvo un momento de solidaridad ante la trágica noticia que afectó a Medel.
La sesión fue inmediatamente suspendida y desde las filas de MORENA se invitó a pacificar un país en el que todos son víctimas del crimen y la violencia.
El miércoles 14 de noviembre el presidente electo Obrador deberá presentar los detalles del plan de seguridad que su gabinete pretende aplicar. Es muy largo el período de transición entre las elecciones presidenciales, disputadas a comienzos de julio, y la asunción de las funciones que la constitución fija para el primero de diciembre.