Comunicadores de diferentes medios y países se reunieron este fin de semana, mientras se conocía el lema de las próximas Jornadas Mundiales de las Comunicaciones Sociales.
Saludo y celebro el inicio de octubre.
El pasado sábado 29 de septiembre compartimos una jornada completa entre varios comunicadores de diversos medios de Argentina, Chile, Ecuador y Paraguay, en la casa de Schoenstatt, en pleno centro porteño. Mientras poníamos en común nuestras intenciones, y seguíamos atentamente, el rico programa elaborado por los comunicadores anfitriones, en el mundo, ocurrían otras cosas en la misma sintonía.
Ese mismo sábado, durante la festividad de los arcángeles, en Roma, en la Salla Stampa, se anunciaba el lema elegido para las 53° Jornadas Mundiales de las Comunicaciones Sociales, que tendrán lugar en 2019. La antelación quizá nos haga un poco de ruido porque siempre andamos a las corridas. Sin embargo, es una práctica interesantísima para ir rumiando los temas. El lema reza, “Somos miembros los unos de los otros”.
Texto que forma parte de la carta a los Efesios, y nos invita a formar comunidades dentro de las relaciones que establecemos dentro de internet. A valorar a nuestros interlocutores, a fomentar el diálogo, la escucha y propiciar la interacción, acciones cuya cotización parece estar en debacle dentro de algunas redes.
Muchas de estas cuestiones anduvieron dando vueltas en las ponencias del sábado, no en Roma, sino en el encuentro de educomunicadores, en la sede de Schoenstatt.
¿Casualidad, sincrodestino o una muestra de espiritualidad colectiva?
Me gusta mucho la pregunta final, creo que la coincidencia-providencia, juega a favor de las construcciones fraternas. Fue un gusto compartir el espacio con los comunicadores de Schoenstatt, los anfitriones, y todos los que se sumaron.