El proyecto Celsia Solar, en Yumbo (Valle), prevé disponer de 35.000 paneles distribuidos sobre 18 hectáreas, que producirán energía limpia equivalente al consumo de 8 mil viviendas.
Pese a ser productor de petróleo, Colombia se une a los países de la región que están desarrollando fuentes de energías renovables. A partir del próximo mes de marzo, en seis meses estará funcionando la mayor planta de energía solar del país. Se trata del proyecto Celsia Solar, una granja de 35.000 paneles solares distribuidos sobre un terreno de 18 hectáreas. El proyecto, que tuvo un costo de US$11 millones, estará ubicado en Yumbo (Valle) y es el primero de un plan de inversiones en energía solar liderado por la compañía de energía de Grupo Argos.
La ambiciosa apuesta generará aproximadamente 16 GWh al año, equivalente al consumo básico mensual de energía de 8.000 viviendas. La granja solar se alzará sobre el terreno en el que hace casi 20 años operaba la planta térmica a base de carbón Termoyumbo. Lo que no deja de ser simbólico.
Colombia está tratando de diversificar sus fuentes energéticas. Según la Unidad de Planeación Minero-Energética (UPME), la energía eléctrica producida es mayoritariamente limpia: 70 % hidráulica, 30 % térmica y 0,6 % son fuentes de energías renovables no convencionales. Esto ha posicionado a Colombia como uno de los sistemas eléctricos ambientalmente más sostenibles del mundo, de acuerdo con el EnergyTrilema Index 2015.
Pese a ello, el Gobierno busca introducir otras fuentes debido a la imprevisibilidad de los fenómenos climáticos, que pueden producir en poco tiempo escasez del agua necesaria para el sistema hidroeléctrico. Durante el último fenómeno de El Niño, Colombia tuvo que enfrentar una de sus peores sequías en la historia. Los niveles de los embalses bajaron a tal punto que el país se vio obligado a prender las centrales térmicas, aumentar sus emisiones de carbono.
La Ley 1715 de 2014 dispone la inclusión de fuentes renovable, sin embargo, para desarrollarlas es necesario avanzar en la investigación y en dotarse de los bienes y servicios necesarios para dicho objetivo, puesto que se deben importar todos los insumos necesarios para avanzar en realizaciones como las plantas solares.
“Con esta primera granja solar buscamos adquirir capacidades para el desarrollo de proyectos fotovoltaicos a gran escala en Colombia, Panamá y otros países de la región”, explicó Carlos Salazar, líder de ingeniería para el desarrollo de la Celsia. La inmensa granja, que ahorrará la emisión de unas 6.600 toneladas de CO2 a la atmósfera, se alinea con las buenas noticias que se han registrado en los últimos años sobre el clima mundial, puesto que las energías renovables registraron en 2015 un crecimiento récord de 8 % y los precios bajos del petróleo frenan las inversiones costosas de los grupos petroleros.
Para más información suscribite a digital.ciudadnueva.com.ar o a la versión papel en ciudadnueva.org.ar/revista/suscripciones.
¡Que bueno!.Otra de Colombia