El próximo domingo se llevará a cabo la I Jornada Mundial de los Pobres.
El 19 de noviembre se celebrará la ‘I Jornada mundial de los pobres’, convocada por el Papa Francisco para enfocar la atención sobre todas las personas excluidas socialmente, descartadas, marginadas y para hacer propio un estilo de vida sobrio, que reaccione ante la cultura de lo desechable y del desperdicio. La invitación, dirigida a todos independientemente de su pertenencia religiosa, es a compartir con los pobres, a partir de todo tipo de iniciativa de solidaridad, mediante gestos concretos de fraternidad: “No pensemos sólo en los pobres como los destinatarios de una buena obra de voluntariado para hacer una vez a la semana, -escribe el Papa- y menos aún de gestos improvisados de buena voluntad para tranquilizar la conciencia. Estas experiencias, aunque son válidas y útiles para sensibilizarnos acerca de las necesidades de muchos hermanos y de las injusticias que a menudo las provocan, deberían introducirnos a un verdadero encuentro con los pobres y dar lugar a un compartir que se convierta en un estilo de vida”.
La propuesta, hecha propia por el Movimiento de los Focolares en Italia, es a comprometerse, sobre todo en el curso de la semana anterior, pero también después, a crear momentos de encuentro, de amistad, de solidaridad y de ayuda concreta a las personas que pasan más dificultad, y acogerlos, el 19 de noviembre, como huéspedes de honor en la propia casa. El logo refleja el sentido de esta jornada, son dos manos tendidas que se encuentran, cada una ofreciendo algo. Dos brazos que expresan solidaridad e invitan a no permanecer al margen.
Mensaje del Santo Padre para la Jornada Mundial de los Pobres.