El viernes 10 de abril de 1970 se disolvían los Beatles, conjunto mayúsculo que revolucionó la música y puso a todo el mundo a tararear en inglés.
En realidad, este genial grupo logró mucho más que eso: emocionó, hizo bailar, soñar y cantar a millones de seres.
Sus integrantes mejoraron nuestro mundo y desencadenaron infinidad de eventos que tuvieron lugar en los inspiradores años 60 y 70. ¡Y están presentes en medio de esta “coronacuarentena”!
La propuesta es sencilla: cálcese un par de auriculares al telefonito o a la computadora, abra alguna sesión de Spotify, busque en artistas “The Beatles”, y deje que suene la lista en forma aleatoria. Será la puerta de acceso a un mundo de sensaciones.
Mientras redactaba este posteo, escuché temas de algunos de sus discos Revolver, Rubber Soul, Sargent Pepper, Help!, el álbum blanco, A hard days night y Beatles for sale: una experiencia maravillosa.
Me deleité con temas como “I’ve just seen a face”, una canción que dura apenas 125 segundos, donde las maracas le dan un sonido especial. O “The night before”, tema de dos minutos y medio con coros bien sencillos y un maravilloso acompañamiento percusivo, al igual que “I’ll follow the sun”, tema híper acústico que no llega a los dos minutos y plantea una atmósfera bien beatle.
Nos despedimos con el tema que cierra el disco de Sargent Pepper: ”A day in the life”, obra con dos partes bien diferenciadas. La primera sección lleva la voz de John y la última está a cargo de Paul. Una orquesta con más de 40 músicos los acompañó en la grabación, cuestión que pone de manifiesto el esfuerzo y nivel musical que los caracterizó a lo largo de su carrera.
Invitamos a ver el video donde conjugan humor y rigor musical. Sobresalen la sección de cuerdas y vientos de la orquesta y la nota final del tema, donde cuatro pianos y un armonio tocan al unísono el acorde “mi mayor” que dura 45 segundos. “A day in the life” nos hace apreciar los sonidos del silencio y el valor de la vida misma.
Todo esto nos da la idea que este colectivo era mucho más que la suma de sus individualidades (John, Paul, George y Ringo). También hay que mencionar a su arreglador (George Martin), conocido como “el quinto beatle”. Pasaron “algunos años” desde que dejaron de grabar, pero siguen sonando tan o más vigentes que antes, acercan generaciones y naciones, mejoran el humor y el amor. Que no es poco…