El seleccionado sigue cuarto, pero pasó de poder ser segundo a archivar una estruendosa derrota por 3 a 0 de local ante Paraguay.
Hoy la Roja podría haber estado en el segundo puesto de la tabla de posiciones para la clasificación al Mundial de Rusia. Pero no fue así y, además, su situación se complica luego de un partido desafortunado en el que fue derrotada por 3 a 0 de local por Paraguay.
Hay poco para decir acerca del partido, que se desarrolló con los chilenos atacando hasta el borde del área guaraní, pero sin poder franquear la doble barrera de habilidosos defensores.
Un desafortunado cabezazo de la estrella Arturo Vidal, marco el 1 a 0 en contra. Un autogol anómalo considerando el rol del jugador. Cuando, en el segundo tiempo, Chile estaba en su mejor momento (70% de tenencia de la pelota), una contra de Paraguay terminó en gol hundiendo al equipo andino. Ya próximos al pitazo final, Paraguay marcó el tercero.
Chile nunca pudo ser contundente y poner en serio peligro el arco paraguayo. Inútilmente Alexis Sánchez, Vidal y Valdivia intentaron construir juego, pero los centros una y otra vez eran interceptados por el muro defensivo paraguayo, y hasta rematar de media distancia se hizo problemático. Una noche negra, en la que todo salió mal. Bien para Paraguay que supo hacer su negocio en modo contundente y efectivo. Una defensa sólida y atacantes ágiles en el contragolpe y peligrosos en la tenencia de la pelota. Hizo desgastar al adversario y dañarlo cuando pudo. Descartando el gol en contra, tuvo cuatro oportunidades y en dos hizo gol. No hizo un gran espectáculo, pero ganó de visitante y sacó tres puntos.
Chile deberá rever su esquema. Cuenta con jugadores de peso, varios de los cuales en equipos de primera en Europa. Pero no es contundente en ataque y no consigue buscar rápidamente alternativas a su esquema de juego. Aunque, por cierto, una mala noche es una mala noche.