El titular de la cartera de Defensa ha llamado a un boicot contra los productos chilenos y utilizó críticas pesadas contra la presidenta Bachelet. Sólo si se disculpa formalmente se considerará concederle la visa de ingreso.
Las diferencias entre Chile y Bolivia tienen un nuevo capítulo. El canciller chileno Heraldo Muñoz advirtió este martes que el ministro de Defensa de Bolivia, Reymi Ferreira (foto), no tendrá visa para entrar al país con el objetivo de visitar a nueve personas bolivianas, siete funcionarios de Aduana y dos militares, actualmente en una cárcel del norte de Chile en prisión preventiva con la acusa de haber penetrado en territorio chileno para realizar robos de camiones.
El episodio mantiene abierta una polémica entre los dos países. La justicia chilena avaló la captura de los nueve bolivianos, habiendo considerado los indicios que sugieren que fueros apresados en territorio nacional con la intención de cometer robos de camiones. Por su parte, las autoridades de Bolivia rechazan tajantemente la acusación y sostienen que el personal policial chileno ingresó a territorio boliviano para arrestar a las nueves personas con acusaciones inaceptables.
El ministro Ferreira utilizó duras palabras contra la mandataria chilena Michelle Bachelet y como protesta convocó a boicotear los productos chilenos comerciados en Bolivia.
“Hemos denegado la visa al ministro de Defensa. Él ha sido una de las personas más perjudiciales para las relaciones bilaterales entre Chile y Bolivia”, manifestó el canciller Muñoz. Las autoridades chilenas denegaron el lunes el visado que desde julio de 2016 necesitan todas las autoridades bolivianas (no así los ciudadanos corrientes) para ingresar a territorio chileno.
“En primer lugar, (el ministro Reymi Ferreira) ha promovido una campaña de boicot contra los productos chilenos y quiere ir a Chile, lo cual es contradictorio”, dijo el ministro Muñoz, quien añadió que “se ha referido en términos ofensivos a la Presidenta de la República y a Chile” y es, además, “responsable de que estos bolivianos, incluyendo los militares, hayan incursionado en nuestro territorio”.
El canciller señaló que, pese a la negativa, si Ferreira “se disculpa formalmente”, el Gobierno está dispuesto a “considerar su ingreso”.
Todavía queda por aclarar entre las diplomacias de los dos países lo que efectivamente sucedió en la frontera. Hasta el momento, las declaraciones entre los máximos líderes no han permitido definir una versión compartida de los hechos.
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