Bachelet anunció cambios en el sistema jubilatorio

Bachelet anunció cambios en el sistema jubilatorio

El Gobierno incrementará en cinco puntos el aporte de las empresas, las administradoras de fondos previsionales devolverán las comisiones en caso de renta negativas de las cuentas personales.

La protesta social en Chile contra el bajo nivel de las jubilaciones que derivan del sistema de administración de los fondos previsionales tuvo su primer resultado: tras encabezar un consejo de ministros extraordinario, la presidenta Michelle Bachelet anunció, en cadena nacional, una serie de medidas que aplicará el Gobierno para mejorar el sistema jubilatorio. “El actual sistema ha llevado a que muchos, demasiados, reciban pensiones muy bajas y queden entregados a su propia suerte”, aseveró la presidenta.

Luego de que más de 750 mil ciudadanos protestaran en todo el país por el bajo nivel de las jubilaciones y por el sistema de administradoras privadas de los fondos aportados por trabajadores y empleadores (AFP), la mandataria había señalado la urgencia de avanzar hacia una AFP estatal, aunque descartó volver al sistema público de reparto.

Bachelet ilustró algunas de las líneas de acción de su Gobierno en la intervención del sistema: “Las pérdidas en los fondos de los trabajadores no pueden ser un negocio para nadie. Por ejemplo, en los periodos en que los fondos de un afiliado tengan rentabilidad negativa, las administradoras deberán devolver en su cuenta las comisiones cobradas durante ese tiempo”. También indicó que se fortalecerá “el carácter solidario del sistema. Nuestro sistema debe ser verdaderamente mixto y tripartito, incorporando el esfuerzo compartido de los trabajadores, los empleadores y el Estado”.

Con ese objetivo, se aumentarán en 5 puntos porcentuales los aportes de los empleadores en un plazo máximo de 10 años. Lo que llevará del actual 10% al 15% el aporte del empleador. Además, dijo la presidenta, “el Estado hará su parte, pues es el principal empleador del país”.

Bachelet sostuvo que se seguirá con el proyecto de una AFP estatal “que introduzca más competencia, que sea una alternativa para los que la quieran y que acoja a los trabajadores y trabajadoras que hoy carecen de cobertura previsional”, indicó. Otro lineamiento anunciado es el fortalecimiento del perfil solidario del sistema asegurando una jubilación mínima para la vejez de quienes no hayan trabajado o carezcan de aportes. Por otro lado, el actual aporte del 10% que realizan los trabajadores seguirá siendo depositado en cuentas individuales “de propiedad de cada trabajador”, y se seguirá incentivando el ahorro voluntario tanto individual como colectivo.

Constituye una novedad la incorporación de representantes elegidos de los cotizantes en la administración de los fondos, de manera que puedan participar en definiciones claves como las políticas de inversión, la elección de los directores y de las compañías en que se invierten los recursos o las campañas de información.

Un punto sensible anunciado por la presidenta Bachelet tiene que ver con las discriminaciones que sufren las mujeres en este campo: “Usaremos una sola tabla de mortalidad, terminando con las discriminaciones que afectan a las pensiones de las mujeres (…), revisaremos la legislación que regula los otros sistemas de pensiones que existen en el país para evitar distorsiones (…), se deberán realizar cambios de parámetros que se usan para estimar las pensiones y asegurar que el sistema no sólo sea justo, sino sustentable”.

La intervención de las autoridades de Gobierno implicará también la modificación de las diversas formas de comisiones ocultas o las comisiones de intermediación, que quitan recursos a las cuentas de los afiliados sin justificación real.

Bachelet se comprometió en promover un entendimiento con trabajadores, empresarios, académicos y los representantes del mundo social y político de manera de acordar una propuesta con un amplio acuerdo.

Para Luis Mesina, de la Coordinadora No + AFP, que organizó la multitudinaria marcha que instaló el tema en el debate político, ponderó positivamente los anuncios y que el Gobierno “haya escuchado a la ciudadanía”. Mesina analizó que “es consecuencia de la movilización que hicimos. Nos faltan algunos pasos. Dio un paso, pero necesitamos más, porque esto es insuficiente” y también anunció para el 21 de este mes una nueva movilización.

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