Cavani anotó de cabeza cuando faltaban poco para sancionar el empate en cero.
Terminó uno a cero a favor de los charrúas el choque de la Celeste con la Roja. Chile entró en la cancha sin Arturo Vidal y con un equipo de reemplazo, acaso sin querer arriesgar demasiado ya que el pase a los cuartos de final estaba garantizado.
Fue un partido disputado y, por momento, con muchas faltas. Hubo varias oportunidades, quizás más del lado chileno que en la segunda mitad controlaron la gran parte del partido. Una única jugada peligrosa demostró el oficio de jugadores como Cavani, siempre letales a la hora de aprovechar errores.
Del lado chileno, Alexis Sánchez no tuvo el socio que suele tener en Vidal o Vargas y el equipo por momentos lució inseguro y con muchos errores. Los uruguayos manifestaron en cambio su solidez y su candidatura para ser campeones de esta Copa América.