En Buenos Aires, en uno de los puntos turísticos más importantes de la Ciudad, se realizó la 4º edición del Run4Unity, donde los Chicos por un Mundo Unido fueron los protagonistas de esta meta: Construir Puentes de Unidad, dar a conocer su compromiso por la Paz y promover también un medio para alcanzarla: la regla de oro.
El punto de partida fue la Reserva Ecológica, lugar que elegido como símbolo de protección y cuidado no solo del medio ambiente sino también de los más desprotegidos, sumando el llamado del Papa Francisco a “Cuidar la Casa de Todos”.
Allí se convocaron alrededor de 200 personas. Los Chicos por un Mundo Unido dieron a conocer la propuesta de este año: Puentes de Unidad.
En el inicio con gran entusiasmo fue la posibilidad de conectarse en vivo con chicos de Venezuela que estaban realizando el Run4Unity en su país, además de recibir saludos de los chicos de la ciudad de Rosario y de Francia.
Y con la regla de oro como premisa: “Hagamos a los demás lo que nos gustaría que nos hagan a nosotros”, en un domingo que amaneció grisáceo comenzó la caminata por la paz, y a medida que avanzaba, con carteles y cantos, el cielo comenzaba a abrirse…
A las 12.00, antes de cruzar el Puente de la Mujer, otro sitio emblemático de la ciudad, fue el momento de hacer el Time Out, un instante de silencio para pedir por la paz en cada punto de la tierra, cuando se advertía que algunos turistas que pasaban por la zona se detenían y se sumaban.
Silvina Chemen, Rabina de la Comunidad Bet El, ayudó a reflexionar sobre el significado de “cruzar” el puente, de ir a la orilla del otro, de construir la unidad con el otro, y que para lograrlo hay que ir juntos, juntos con el otro, porque si queremos construir un mundo unido no se puede hacerlo solo, se necesita del otro.
Fue así que juntos, unidos con cintas de distintos colores, chicos, adultos, jóvenes, personas de diferentes credos (musulmanes, católicos, budistas, judíos) personas que creen en los valores, cruzaron el puente que simboliza también una manera de recordar que se puede salir de uno mismo y cruzar los propios límites, para ir al encuentro del otro, que es distinto, y por eso, nos enriquece.
Se concluyó en la Plaza Holanda, frente al monumento de Anna Frank, adolescente que testimonia y recuerda que la guerra nunca es el camino a seguir, y que vale elegir vivir en paz y por la paz. Allí se ataron con nudos las cintas de colores a una gran red, simbolizando la unidad.
Para terminar, se leyó y firmó el MANIFIESTO POR LA PAZ. Lo leyeron chicos representantes de distintas religiones, budistas, judíos, cristianos, musulmanes y representantes de personas que creen en valores sin convicción religiosa.
La despedida fue con la alegría y la certeza de que juntos se pueden construir puentes, derribar prejuicios, y que conocer la cultura del otro enriquece. Como los Chicos por un Mundo Unido de aquí hay muchas personas más que creen y quieren la paz en cada rincón del mundo. Que eligen cada día vivir por la solidaridad, por un mundo más justo y fraterno, por un MUNDO UNIDO…
Más información en la web oficial del Run4Unity