Está siendo analizada por el Supremo Tribunal Federal.
¿El actual presidente interino de Brasil, Michel Temer es corresponsable de las violaciones de las normas que han determinado la momentánea suspensión de la presidenta Dilma Rousseff? La pregunta es clave, porque siendo vice presidente Temer participó de algunas de las decisiones que han costado a la mandataria el proceso de impeachment.
El objeto de la pregunta inicial está siendo estudiado por el Tribunal Supremo de Brasil que deberá analizar una demanda que insta a la apertura de un juicio político contra el presidente interino presentada por un abogado, Mariel Marley Marra, que sostiene actuar por iniciativa personal. En su momento, la Cámara de Diputados no aceptó considerar su demanda en la que señala que Temer, en su condición de vicepresidente, suscribió en 2015 cuatro decretos que modificaron los presupuestos del Estado sin haber sido aprobados por el Congreso, como establece la ley.
Uno de los once miembros del Supremo Tribunal, Marco Aurelio Mello, anunció que remitirá al pleno del organismo judicial la demanda de Marra, los determinará el pronunciamiento de los jueces respecto de un posible proceso de impeachment. Una de las acusaciones contra Rousseff ha sido precisamente la firma de decretos relativos a los presupuestos sin la debida venia parlamentaria, además de los corrimientos de partidas del presupuesto para “maquillar” los resultados del Gobierno en 2014 y 2015.
El Supremo Tribunal todavía no tiene fecha para pronunciarse sobre el caso específico.
Temer está ocupando el cargo de presidente, del que Dilma Rousseff ha sido suspendida durante los 180 días. Un proceso de impeachment contra él agregaría un elemento más de debilidad institucional en un momento delicado para Brasil. Una supuesta destitución o sustitución de Temer, además investigado acerca de la proveniencia de los fondos que han financiado su campaña electoral, llevaría a la presidencia interina al presidente del Senado, Renan Calheiros, a su vez investigado en el marco del escándalo Petrobras.
Aunque el Supremo Tribunal acoja la demanda y la remita a la Cámara para su análisis, siguiendo el trámite previsto por la Constitución, parece difícil que ésta consiga los votos necesarios para poner en marcha el proceso de impeachment aunque disponga del autorizado aval en lo jurídico del supremo órgano judicial. El riesgo sería el de crear una situación fuertemente contradictoria. Un factor que, posiblemente, la oposición no ha considerado a fondo.