La Organización Mundial de la Salud, junto con su organismo panamericano, se unen a la campaña para prevenir esta enfermedad, realizando muy simples controles.
En la región de las Américas, el cáncer de mama es el más común en mujeres y la segunda causa principal de muerte por cáncer en mujeres. Se estima que más de 462.000 mujeres son diagnosticadas y casi 100.000 mueren por cáncer de mama cada año. Se estima que, si se mantienen las tendencias actuales, para 2030 aumentará en un 46% en la región de las Américas.
En los países de altos ingresos, los programas de cribado organizado mediante la mamografía han dado lugar a un diagnóstico precoz, y junto con un tratamiento eficaz, han llevado a la reducción de la mortalidad por cáncer de mama. Sin embargo, hay muchos desafíos en la implementación de este tipo de programas de cribado organizado eficaces en entornos de recursos limitados. Por lo tanto, la sensibilización y la comprensión sobre los riesgos de cáncer de mama, los primeros signos y síntomas y la concientización general sobre la salud mamaria es una parte importante de un enfoque de salud pública para el cáncer de mama.
La iniciativa apunta por tanto a difundir el cuidado por la propia salud, con controles frecuentes que pueden en modo temprano ayudar a detectar un mal que es curable.