Economía de Francisco – La convocatoria del papa Francisco para vivir una nueva economía basada en el espíritu del santo de Asís ha reunido a miles de jóvenes en todo el mundo. Una nueva oleada se aproxima.
Pocas cosas en el mundo provocan la sensación de inmensidad como lo hace estar parado a la orilla del mar y mirar hacia el horizonte. Sentir el rumor del oleaje que arrastra una corriente de agua fría, que a medida que se acerca y nos alcanza se funde con la arena y trae agua fresca. Una nueva ola y el ciclo se reaviva.
A propósito de ciclos, hoy hablamos de uno en particular. Hace poco más de dos años, el papa Francisco escribió una carta dirigida a jóvenes emprendedores, economistas y agentes de cambio. El mensaje era claro y concreto: los convocaba a un evento en marzo de 2020, en Asís. Un evento para hablar y escuchar a quienes se forman y trabajan por una economía fraterna. Así nació la Economía de Francisco, que tenía como objetivo el compromiso de miles en todo el mundo por construir una economía más justa e inclusiva. La pandemia llegó y el evento se suspendió.
Pero el evento era solo la playa. La Economía de Francisco se convirtió en un verdadero movimiento en el que es difícil dimensionar la profundidad de sus aguas y sus límites. Lo cierto es que, como el mar, trae oleadas de agua fresca.
Naveguemos un poco por sus aguas para mapear y entender qué, cuándo y cómo ha tomado forma este movimiento:
La pandemia nos arrinconó a timonear de formas imprevistas. Por un lado, construimos una base sólida: 2000 jóvenes de 120 países del mundo trabajando y poniendo su empeño en iniciativas locales e internacionales. Más de 300 eventos preparatorios en los primeros 8 meses. Eventos que tenían como punto de partida pensar la economía diversamente: en las universidades, centros de estudio, empresas, organizaciones, etc. La elaboración de un documento al que hemos llamado “Declaración final y compromiso común”*, en el cual se hace una serie de solicitudes a los economistas, emprendedores, industrias, políticos e instituciones del mundo. Este documento se convierte además en el compromiso propio para cada uno de los integrantes. Una especie de brújula de navegación. Por el otro, continuamos apuntando hacia un evento global, que por las circunstancias lo hicimos de forma digital en noviembre de 2020: una verdadera fiesta para dar voz y rostro a los jóvenes que mueven esta iniciativa. ¡Y sobra decir que después de ese evento, descubrimos que todo esto era solo el inicio de algo más grande!
El siglo XXI ha hospedado y alentado diversos movimientos en los que el protagonismo de los jóvenes sale a flote, pero ninguno como este, que nace de la inspiración de un santo que renuncia a las riquezas mercantiles y que toca con las manos la pobreza, el dolor del ignorado, el sufrimiento de la tierra y que da pauta a nuevas formas de pensamiento económico. Además, convocados por el líder de una institución, como lo es el papa Francisco, pero al mismo tiempo confiando plenamente en nosotros el cambio de curso de la economía global.
Adentrarse en la Economía de Francisco es adentrarse en los tiempos de los bienes comunes y relacionales. Es adentrarse a reconocer la urgente necesidad de cambiar la economía actual y entender que todo está conectado, y que no se puede hablar de ambiente sin hablar de economía.
“¿Qué pasaría si las grandes universidades enseñaran los bienes comunes en lugar de los privados? ¿Y si los negocios sociales, en lugar de ser considerados una forma ‘híbrida’ de negocio, se convierten en el enfoque normal? ¿Y si las finanzas éticas y verdes dominan el sector financiero?”. Tratando de dar respuesta a estas y tantas otras preguntas, uno de los puntos fundamentales en este gran proceso ha sido la formación, porque creemos que uno de los tantos bienes comunes de la humanidad es el conocimiento. Para ello, hemos lanzado la primera “EoF School”. Una escuela de formación con profesores de diversos campos y disciplinas, con jóvenes discutidores, clases, workshops, etcétera.
Y así podríamos continuar mencionando tantas otras realidades e iniciativas que en paralelo a este movimiento van surgiendo, dentro, fuera, aquí y allá: una escuela de verano, 10 becas para estudios de doctorados, una escuela de formación para emprendedores, eventos “living eof” que reflejan la identidad de la Economía de Francisco, etc. Pero ante todo esto, lo más claro y evidente es que si se quiere cambiar el mundo, cambiar la economía es una prioridad para todos.
Ahora nos encaminamos a un nuevo evento global, digital. El próximo 2 de octubre nos volvemos a encontrar y a renovar el compromiso por dar un alma a la economía global. Un evento que se realizará buscando no ocupar espacios, sino activando procesos, como el propio papa Francisco nos ha pedido.
Porque en medio de un sistema económico que quema y destruye, la Economía de Francisco se ha convertido en un mar de esperanza, para el presente y para las nuevas y futuras generaciones
https://francescoeconomy.org/final-statement-and-common-commitment-es/
* Periodista, encargada de comunicación, miembro del staff de The Economy of Francesco.
Artículo publicado en la edición Nº 632 de la revista Ciudad Nueva
