La Armada anunció que dio por finalizada etapa de búsqueda y rescate del submarino ARA San Juan y sólo se procederá a la búsqueda del mismo.
La noticia heló a un país en entero, que desde el 15 de noviembre está en vilo, esperando saber qué sucedió con los 44 tripulantes de la Armada Argentina que navegaban en el submarino ARA San Juan. “Se declaró finalizado el caso SAR (de Búsqueda y Rescate), cambiando a la fase de búsqueda del mismo”, fueron las palabras del vocero de la Armada, Enrique Balbi, en la tarde de ayer.
La desolación de cada uno de los familiares de los submarinistas es desgarradora. En cada entrevista, en cada imagen, se refleja el profundo dolor y una enorme impotencia por la inexplicable ausencia y por no saber qué fue lo que provocó el naufragio.
Atrás quedó el último contacto de 15 días atrás que hablaba de un “ingreso de agua” y “un principio de incendio en las baterías”. También pasó el parte que refería a “un evento singular, corto, violento y no nuclear, consistente con una explosión” que causó estupor, bronca y angustia en los familiares, quien desde el primer momento dudan de la información que brinda la Armada.
Según el vocero Balbi, ya transcurrió el doble del tiempo estipulado para realizar un posible rescate y por eso se ha pasado a la etapa que solo remite a la búsqueda del submarino pero no a la de los 44 tripulantes.
A raíz de la noticia, el presidente Mauricio Macri suspendió sus los actos que tenía en la primera hora de hoy y se habla de la posibilidad que brinde un mensaje a la sociedad.
Argentina llora por esta pérdida aún inexplicable. Pero es imprescindible saber qué es lo que sucedió. Las 44 familias desgarradas lo necesitan.