Ucrania, Rusia, Alemania y las divisorias

Ucrania, Rusia, Alemania y las divisorias

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se dirigió a los parlamentarios del Bundestag alemán y pidió ayuda a Alemania para poner fin a la guerra en su país.

El jueves 17 de marzo, la vicepresidenta de la Cámara baja del Parlamento alemán, Katrin Göring-Eckardt, dio la bienvenida al presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, quien se dirigió a los diputados a través de videoconferencia. En su alocución, el premier ucraniano afirmó que pese a que los políticos dijeron “nunca más” a la guerra, “estamos viendo que esas palabras no tienen valor”. Fue claro, y pidió ayuda a Alemania para poner fin a la guerra en su nación. “El pueblo de Ucrania quiere vivir libre, sin someterse a ningún país”.

Se refirió a la grave situación de la población civil en ucraniana debido a los bombardeos de Rusia, y al sufrimiento, de los habitantes de la ciudad de Mariúpol, como ejemplo de una guerra en la que las tropas rusas atacan a civiles sin miramientos. 

Zelenski reprochó a Alemania haber priorizado la economía y el suministro del gas ruso.

“Les advertimos que Nord Stream 2 era un arma. Y su respuesta fue economía, economía, economía”, en alusión al gasoducto germano-ruso, con  unas sanciones que, “son insuficientes y llegan tarde”.  Al tiempo que alertó de que con la invasión de su país, Moscú está “construyendo un nuevo muro contra la libertad”. El mandatario fue elocuente: “Cada bomba que cae, cada decisión que no se adopta, es una piedra con la que se construye ese muro”. Acto seguido, se dirigió al canciller alemán, Olaf Scholz, al que pidió que “dé a Alemania el rol de liderazgo que se merece” y que apoye decididamente a su país, algo que no puede limitarse, en su opinión, a las sanciones económicas hasta ahora dictadas contra el entorno del presidente ruso, Vladimir Putin.

“Es difícil para nosotros sobrevivir a todo esto sin la ayuda del resto del mundo, defender a Ucrania y defender al mundo libre de Europa”, añadió, para insistir en la metáfora del muro, en alusión al que durante décadas partió Berlín. 

Parafraseó así el histórico discurso que Ronald Reagan pronunciara en Berlín en 1987, cuando solicitara a Gorbachov que lo derribara. Tres décadas más tarde, se renovó el pedido, pero provino del premier ucraniano, y fue dirigido al canciller alemán: “Señor Scholz, destruya ese muro“.

Fuente:

https://tinyurl.com/220318Muro

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