Lo afirman David Lebón y Pedro Aznar: el tiempo es veloz.
Se nos escapa, no nos alcanza para completar todo lo que queremos hacer.
Se nos pierde en la televisión, en la compu, o en los telefonitos.
Lo que sacrificamos es nuestra alimentación, nuestro modo de vida, el no enfocarnos en nuestros verdaderos objetivos. ¿Algo más? Si el tiempo es lineal, no hay vuelta atrás.
Sugerimos ver documentales del canal Encuentro, algún canal de música, o DeporTV, y hacer algunos ejercicios mientras estamos frente al televisor.
Otra sugerencia, es la de evitar despertarnos en twitter, instagram, facebook o cualquier otra red social, démonos al menos 15 minutos de paz, para empezar el día con nosotros mismos, y con las personas que convivimos.
Si la jornada incluye trayectos en bondy, uno puede optar por alternar con caminatas, y allí matizar con la escucha de música, mediante auriculares.
Si es por la mañana temprano, uno puede dejarse un buen rato para escuchar el sonido de los pájaros.
El tiempo es veloz, pero alcanza. Solo basta con planificarlo, para que el disfrute sea mayor.