Los estudiantes secundarios fueron recibidos por el presidente Horacio Cartes.
Siguen movilizados los estudiantes paraguayos que persiguen el objetivo de una mejor educación para todos. El presidente de la República, Horacio Cartes, aceptó reunirse con los representantes de las federaciones de estudiantes secundarios y firmó el compromiso en tres puntos que éstos exigían. Por su parte, los jóvenes delegados aceptaron reanudar las clases y asumieron el compromiso de “ser protagonistas en los procesos de enseñanza y aprendizaje como principal responsable de calidad educativa”. También se comprometieron en el control de la ejecución de los proyectos de mejoramiento edilicio de los colegios y la distribución de kits escolares y de alimentación.
Este sábado se realizará la primera reunión de la Mesa de trabajo multisectorial con poder deliberativo con ministros, presidentes de comisiones parlamentarias y representantes de docentes, padres y alumnos, para avanzar en el tema del aumento progresivo de los recursos para la educación (hasta el 7 por ciento del PBI), la reforma educativa con énfasis en la formación docente, y la reingeniería del ministerio y de los mecanismos de participación estudiantil.
La acción de los estudiantes se mantuvo en varias instancias. En el departamento de Itapúa, los alumnos de un instituto técnico agrícola lograron la destitución del director, del administrador y del jefe del internado, acusados de maltratos verbales y psicológicos y graves irregularidades administrativas. Los universitarios siguen movilizados por la gratuidad de la educación superior, al tiempo que participan del lento proceso de reforma de la universidad. En el Congreso se llevó a cabo esta semana la audiencia pública solicitada por los estudiantes para aportar su punto de vista acerca del proyecto de ley que pretende regular los aranceles en materia de certificados y diplomas, legalizaciones y visados. El proyecto, que ha sido aprobado en Diputados y está en trámite en el Senado, recibió el rechazo de los estudiantes que formularon una detallada contrapropuesta.
En sus intervenciones, los estudiantes reiteraron además el planteo de destinar el 7 por ciento del PBI en educación. Advirtieron también que, de ser necesario, realizarán movilizaciones, mientras denunciaron que el actual sistema de admisión a los estudios superiores es una auténtica “herramienta de exclusión social”. Según los universitarios, el costo de los aranceles, la ausencia de una tarifa estudiantil en el transporte, el examen de ingreso que exige una puntuación mínima que consideran elevada, que obliga a los candidatos a frecuentar onerosos cursillos de preparación.
Para Mara Alfonzo, de la coordinadora #EducaciónSinBarreras, una de las impulsoras de la campaña “Basta de aranceles”, “la universidad no puede seguir siendo una herramienta de exclusión social ni un sueño lejano de millones de paraguayos”. Según dicha coordinadora, el 69 por ciento de los jóvenes no accede a la educación universitaria, y el 80 por ciento vive en situación de pobreza extrema.
Foto: Cigarra Py