En el departamento del Cauca, cinco miembros de una comunidad indígenas fueron asesinados por un grupo armado disidente de las FARC.
Siguen los asesinatos de líderes sociales, activistas de los derechos humanos y de indígenas en la Colombia alejadas de los grandes centros, allí donde con frecuencia en Estado no llega. Esta vez, cinco indígenas murieron durante un ataque de un grupo criminal armado. Murió la gobernadora de la comunidad nasa de Tacueyò, en el departamento del Cauca, junto con otros cuatro comuneros. Neehwesx Cristina Bautista y las otras cuatro víctimas murieron cuando unos hombres que bajaron de un vehículo comenzaron a disparar, hiriendo además a otras seis personas.
Las Fuerzas Armadas confirmaron la masacre, atribuyéndola a un grupo armado organizado residual que trataba de rescatar a tres de sus miembros detenidos por la guardia indígena de la zona. La asociación local de cabildos indígenas señaló a los integrantes de la columna Dagoberto Ramos, una banda de disidentes de la guerrilla de las FARC que no se sumaron al proceso de paz y que actúa como un grupo criminal que intenta controlar el narcotráfico en la región. “Todo nuestro compromiso con las comunidades ancestrales del departamento”, afirmó el presidente Iván Duque al tomar medidas ante lo ocurrido. “Estamos en una grave emergencia –dijo-. La Guardia Indígena no se va a quedar doblegada, no nos van a asustar”, dijo el coordinador nacional de esa institución, Luis Acosta.
El Defensor del pueblo, por otra parte, señaló que el grupo armado “no deja pasar a ninguna misión humanitaria” y tampoco las autoridades para poder establecer lo que realmente ocurrió. La Defensoría emitió entre agosto y principios de octubre dos alertas sobre la situación de indefensión de las comunidades indígenas del Cauca. En una de ellas identifica con precisión a la población en riesgo en algunos municipios, entre los que se encuentra el de Toribio, donde ocurrieron los hechos delictivos.
“Frente al avance de los grupos armados ilegales y la débil presencia estatal, las guardias indígenas se han convertido en factores de protección gracias a su labor de defensa del territorio”, señala el organismo. Cerca de allí, en Corinto, el lunes fue torturado y asesinado un líder social, Flower Jair Trompeta. Los denunciantes culpan del crimen a miembros del Ejército. Este nuevo episodio confirma que la población, a menudo, queda en la violencia cruzada de grupos armados guerrilleros, narcotraficantes, paramiltares y Ejército.
Hasta que no reconozcamos la dignidad de los pueblos ancestrales y sus descendientes, Mientras sigamos imponiendo un modelo cultural euro céntrico no habrá paz en nuestra región. Hay pueblos con derechos preeminentes que solo aspiran a ser protagonistas y convivir en la diversidad cultural, con sus instituciones, cosmovisión y valores; la persecución y la opresión ya no son soportables. Estos pueblos son los guardianes naturales de la casa común, la biodiversidad y el equilibrio climático; no miran los recursos naturales como una fuente c de explotación mercantil. Esta es la línea del Sínodo del Amazonía y la Laudaro Sii. Un paso sabio hacia la humildad y el reconocimiento de la riqueza de estos pueblos. La clave es la alteridad. Dios no puso nada por error, cada cual y cada cultura es un regalo para todos, y cada uno tiene su misión.
Génesis 1:31 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.