Desde hoy y hasta el domingo 12 de junio se desarrolla en Roma el Jubileo de las personas enfermas y con discapacidad, en el marco del Año Santo de la Misericordia.
En la Oficina de prensa de la Santa Sede tuvo lugar la presentación de este Jubileo, enmarcado en el Año de la Misericordia con la intervención de monseñor Rino Fisichella, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, monseñor José Octavio Ruiz Arenas y monseñor Graham Bell, respectivamente secretario y subsecretario del mismo dicasterio.
El Jubileo comenzó esta mañana con la peregrinación habitual desde Castel Sant’Angelo hacia la Puerta Santa. Por la tarde, a las 17, en la iglesia de Santa María in Vallicella, habrá una conferencia de catequesis dirigida a todos, y en particular a las personas sordas y ciegas, que dará el padre redentorista Cyril Axelrod, también sordo y ciego, y conocido en todo el mundo, especialmente en China, Reino Unido y Sudáfrica, por su compromiso total con la discapacidad. La catequesis será accesible en la lengua internacional de los signos y en la lengua de signos táctiles.
El sábado 11 tendrá dos momentos especiales. El primero, de las 10 a las 11, cuando los peregrinos enfermos y las personas con discapacidad se den cita en algunas iglesias del centro histórico para una catequesis en diferentes idiomas y en varias formas titulada “La misericordia, fuente de la alegría”. Cabe destacar que en la catequesis de la iglesia de San Andrea della Valle, se escenificará un pasaje del Evangelio y se acompañará la oración con una serie de gestos muy sencillos para que puedan participar de ella las personas con discapacidad intelectual.
El segundo momento importante será la fiesta “Más allá del límite” que, de las 18 a las 20, se celebrará en los jardines de Castel Sant’Angelo en la que participarán célebres artistas, cantantes y bailarines, a los que se unirán las personas discapacitadas. Siempre en los jardines se montarán siete “Tiendas de la Misericordia” donde se compartirán iniciativas pastorales y experiencias de asociaciones de voluntarios con el mundo de la enfermedad y la discapacidad.
El domingo, 12 de junio, se abrirá en la Plaza de San Pedro con los testimonios de personas afectadas por la enfermedad o la discapacidad y de aquellos que viven en estrecho contacto con ellos, bajo el lema “Cuando soy débil soy fuerte”.
A las 10.30 el Papa presidirá la celebración eucarística que podrá ser seguida en directo en todo el mundo en streaming con la lengua de los signos. El servicio litúrgico y las lecturas tendrán como protagonistas a las personas con discapacidad, en particular estarán presentes entre los monaguillos algunos muchachos down y con discapacidad intelectual; uno de los diáconos, alemán, es sordo y la primera lectura la leerá una persona discapacitada española, mientras que la segunda, en inglés, será leída en braille por una niña ciega.
Todas las lecturas serán traducidas por personas sordas, de diferentes países, en el lenguaje internacional de signos, mientras que las oraciones de los fieles en varios idiomas, las leerán personas enfermas y discapacitadas de diferentes nacionalidades.
Además, por primera vez en la plaza de San Pedro, la lectura del evangelio será dramatizada por un grupo de personas con discapacidad intelectual para permitir que el texto sea entendido por los peregrinos con discapacidades mentales.
En el momento de la comunión el Coro de la Capilla Sixtina será sustituido por la coral “Amoris Laetitia” que, junto con otros coros que se sirven también del lenguaje de los signos formados por personas con discapacidad, cantará el “Pan del cielo”.
En el curso de la misa estará expuesto el cuadro de la Virgen Salus infirmorum conservado en la iglesia de Santa María Magdalena en el Campo de Marte en Roma, venerada e invocada como ayuda de todas las personas enfermas.
Merece especial atención la iniciativa patrocinada por la Fundación Tag Med: desde el viernes, 10 de junio en las proximidades de las basílicas vaticanas habrá cuatro “Puntos de salud” que ofrecerán de forma gratuita, en especial a las personas sin hogar de Roma, atención sanitaria especializada. Alrededor de 350 voluntarios entre religiosas, enfermeras de la Cruz Roja, militares y trabajadores de la salud brindarán a más de 700 personas sin techo la posibilidad de una visita de medicina general, dermatología, senología, pediatría y ginecología. Está previsto el suministro de vacunas contra la neumonía que es una de las patologías más graves para estas personas. Para las mujeres se efectuarán PAP test siempre gratuitos.
Después de haber presentado el Jubileo de las personas enfermas y discapacitadas, el arzobispo Fisichella facilitó algunos datos sobre el desarrollo del Año Jubilar. “Según los datos actualizados a día de hoy, el número de peregrinos que vinieron a Roma para las diversas iniciativas jubilares y visitaron las cuatro basílicas -además de la Puerta Santa del Santuario del Divino Amor- es de 9.100.935.
Un número ciertamente significativo durante los primeros seis meses del Jubileo, lo que confirma -dijo- el gran deseo de los fieles de todo el mundo de venir a Roma para encontrarse con el papa Francisco, no obstante que haya muchas Puertas de la Misericordia en toda la tierra”.
Fuente: AICA