Los ñoquis son una pasta casera nacida en un clima de pobreza, cuando en los hogares ya no quedaba más que algo de harina y papas, a veces solo el primer ingrediente. Con el tiempo se han afirmado como un plato gustoso y de fácil preparación.
Hiervan 1 kg de papas hasta su cocción. Las colocarán en una cacerola cubiertas de agua fría y una vez que comience a hervir el agua calculen de 30 a 40 minutos, según el tamaño de las papas. Verifiquen en todo caso con un tenedor si están a punto. Aplasten las papas como para hacer un puré y agreguen un huevo algo batido, una pizca de sal y 300 gramos de harina. Trabajen la masa lo mínimo necesario para que sea homogénea, pues de trabajarla en exceso los ñoquis se volverán duros. Luego separarán un pedazo y formarán una suerte de largo chorizo del espesor de unos dos centímetros. Una vez que habrán transformado la masa en estas tiras, las cortarán en pedacitos y los guardarán sobre un repasador para que no se sequen. Finalmente, con un tenedor tomarán cada ñoqui y lo arrastrarán sobre la mesa para que tome la forma conocida, según muestra la foto.
A este punto los ñoquis ya estarán listos para ser cocidos en agua salada e hirviendo. Una vez que vuelvan a flotar es que estarán cocidos. Los sacarán bien escurridos.
Aparte, habrán preparado una salsa salteando primero media cebolla y un diente de ajo en poco aceite. Añadan media zanahoria pequeña picada y 300 gramos de pulpa de carne en trocitos. Completen con media taza de té de arvejas, dejen que todo tome sabor, aliñen con sal, pimienta, orégano fresco y dos tomates en trozos pequeños. Dejen cocinar durante aproximadamente media hora. Unan los ñoquis con la salsa de tomate y sirvan con abundante queso rallado.
Acompañen con vino tinto, merlot o syrah, o un rosado.