La entidad nace con vistas a la 25ª Conferencia de la ONU sobre el Clima (Cop25), que abordará cuestiones relativas al calentamiento global.
El evento cumbre dedicado al cambio climático en curso se celebrará en Santiago el próximo mes de diciembre. El acuerdo entre las instituciones que han dado vida a la Alianza Interreligiosa y Espiritual por el Clima religiosas fue firmado en la capital chilena el pasado domingo 21. Han firmado su constitución una veintena de entidades y organizaciones religiosas, comunidades, congregaciones y movimientos espirituales. Entre ellas, figuran la Asociación Chilena de Diálogo Interreligioso para el Desarrollo, la Coalición Ecuménica para el Cuidado de la Creación, la red Amerindia, la Conferencia de Religiosos de Chile, el Consejo Latinoamericano de Iglesias, la Familia Franciscana, los claretianos, pero también organizaciones evangélicas y bautistas, asociaciones de musulmanes y budistas.
El objetivo de esta Alianza, según se expresa en el acuerdo, es promover un cambio sistémico, cultural y espiritual que se traduzca en transformaciones económicas y políticas frente a la crisis climática existente. Ante ello, las organizaciones adherentes han manifestado su disposición para ponerse al servicio de la comunidad, y así facilitar vínculos que puedan generar incidencia público-política desde sus respectivas identidades.
«Nuestra misión – expresan – es promover un cambio sistemático, cultural y espiritual, que se traduzca en cambios económicos y políticos frente a la crisis climática generada por el estilo en que vivimos, producimos y consumimos. Es esencial que nuestra forma de vida se desarrolle teniendo en cuenta los límites del planeta. Queremos ser parte de este proceso, con nuestra mirada en la tierra y reconociendo en ella el dolor causado por nuestras acciones y declarando la urgencia de nuestra tarea. Nos sentimos interpelados por las desigualdades e injusticias que se generan y se agudizan a causa de la crisis ambiental. Somos conscientes de que la transformación requiere cambios significativos, respecto a los cuales queremos apropiarnos de nuestro papel y ser una voz de aliento».
¡Muy hermoso!