El último domingo del año, en la fiesta de la Sagrada Familia, se llevó a cabo un Encuentro Navideño de Mujeres de las Villas del Conurbano que finalizó con una Misa.
La misma fue presidida por Pepe Di Paola, quien afirmó: “Nos reunimos para celebrar la vida y el nacimiento de Jesús entre nosotros. Especialmente del cuidado de la vida llevado a cabo por las mujeres de nuestros barrios en nuestros barrios populares. ¿Hace falta en medio de la pandemia charlar, ni siquiera es charlar, este debate de un pequeño grupo de diputados y senadores que deciden por todos los argentinos y las argentinas? Y es verdad que la mayoría de los argentinos y las argentinas rechazan el aborto. Con las encuestas en la mano, que nos llegan a nosotros y que no las hacen públicas, sabemos que la mayoría no está de acuerdo con el aborto. Imaginen las encuestas de las distintas provincias argentinas en donde las diferencias son todavía más grandes. Nos parece muy bien considerar todos los temas y charlarlos pero nos parece que no es el momento adecuado. Esta frase de la Madre Teresa ‘Las naciones que han legalizado el aborto son las más pobres’. Son las naciones ricas, las que tienen más dinero, las que dicen estar en el primer mundo, pero ante los ojos de Dios son las más pobres porque han legalizado la muerte. Que senadores y diputados se pongan del lado de los pobres, del lado de la vida.”
Las referentes se dieron cita en la Parroquia san Juan Bosco de Villa La Carcova de José León Suárez. Johanna expresó sus sentimientos a flor de piel: “Yo soy la voz de las que callan o de las que son intimidadas por sus pares. Hoy vengo a preguntar: ¿quién nos vino a consultar a nosotras, las mujeres que vivimos en la villa, cuáles son nuestras prioridades? La mujer de villa en todos estos años estuvo ocupada, no discutiendo en un Senado, estuvo ocupada dando amor, abrigo, contención y en estos últimos 9 meses dando alimentos a nuestros pibes y a los ajenos, a los abuelos. También nos dimos contención por nuestros muertos, sin poder despedirnos, asustadas por la inseguridad. Porque les cuento que mañana se cumplen 5 meses de que asesinaron a mi papá. Lo mataron. Y nadie me vino a dar una respuesta. Eso es lo que yo quiero discutir. ¿Y la educación? En estos 9 meses nos hicimos de figurita para que nuestros pibes estudien. Sin celular, sin internet, sin fotocopias. Y también quiero discutir de la salud. A cada funcionario, político o activista a favor del aborto los invito a que vengan a pedir un turno en nuestras salitas de la villa. Que vengan a hacer fila a las 4 de la mañana para que a las 8 le digan que no hay, que la ginecóloga falta o que la pediatra está enferma. La mujer de la villa no quiere abortar. No le gusta el aborto. Quiero que nos dejen de usar para sus intereses. Quiero que sepan que la mujer de villa recibe la vida como viene”.
Gladys, comprometida y luchadora vecina, madre y abuela, detalló aún más el trabajo comunitario realizado: “Mientras todos discutían, acá se abrieron las puertas y se cocinó para más de 3.000 personas diariamente. Feriados, lluvia, calor, seguimos estando acá. Quería contarles también que mientras seguían discutiendo, hace dos años se fundó el Hogar del Abrazo Maternal. Recibimos a las mujeres, las acompañamos durante el embarazo, hacemos talleres, escuchamos, vamos al médico, generalmente son mujeres que están solas y no porque lo eligieron sino porque les tocó, pero aun así no eligen abortar”.
Las encuestas citadas por Pepe son estudios de opinión fresquitos, de fines de noviembre y mitad de diciembre de 2020, de Jorge Giacobbe y de Julio Aurelio. La de Giacobbe indica que el 60% de los encuestados no aprueba la legalización del aborto ante un 26,7% que sí lo hace. En el caso de Aurelio sus resultados van en el mismo sentido.
Esperamos que la Cámara Alta sea portadora de estas voces, y que en medio de este año plagado de incertidumbres y dudas, defendamos la voz de los sin voz, los más pequeños y sagrados de nuestra humanidad.
Fuente: Prensa del Equipo de Sacerdotes de Villas y Barrios Populares de Capital y Gran Buenos Aires