Lo señalan autoridades municipales, organizaciones gremiales y ambientalistas.
Las alertas sobre el estado del lago Titicaca están siendo lanzadas desde hace tiempo. Para el alcalde del municipio de Copacabana, Pedro Nina Ramos, la cantidad de peces se redujo a la mitad en 20 años. Por su parte, la Liga de Defensa del Medio Ambiente (Lidema), señala la desaparición de dos especies en los últimos 15 años, la boga y el humanto y que también el pejerrey y el ispi están por desaparecer del comercio. Según los estudios de esta organización, incide en el fenómeno también la disminución permanente de los niveles del agua.
El coordinador de Capacitación de Lidema, Edwin Alvarado, señaló que una de las razones de la extinción de especies es la introducción, sin previsiones, de especies de peces que se alimentan del pejerrey y la trucha. Otras causas se presentan con la sobreexplotación piscícola y la contaminación que se vive en la zona lacustre. Eso provocó que hace un par de años atrás el pejerrey fuera declarado como especie comercialmente extinta, pues ya no se la encuentra en los mercados de abastecimiento, para el consumo interno.
Alvarado explica que el sistema de pesca provoca a su vez la desaparición de especies. Por un lado hay sobre explotación de la pesca. Por otro lado el sistema empleado tiene efectos negativos: “Las mallas que usan los pescadores también atrapan a sus crías, que no se desarrollan y que, por tanto, no cumplen su ciclo de reproducción”. La práctica amenaza, además, la seguridad alimentaria de las comunidades de la ribera, asegura el experto, las que no tendrán excedentes para su consumo.
El problema ha sido evidenciado en estos días por la Federación de Comerciantes en Pesca y Agricultura de La Paz, que denunció que debido a la contaminación hubo un descenso del 75 por ciento de la cantidad de pescados provenientes del lago Titicaca. La organización invitó a las autoridades a que intervengan y propuso la realización de truchas u otras especies.
Según Lidema, existe una falta de capacidad de autorregulación de las comunidades pesqueras y cierta indiferencia de las intendencias municipales, las que no ejecutan un control eficiente sobre esta actividad. La extinción de especies del lago Titicaca afecta notablemente el ecosistema y se une a otros fenómenos como la disminución del nivel del agua que debería ser investigado, ya que una parte de ese recurso es utilizada para el riego de cultivos de las comunidades ribereñas pero sin controles suficientes.