Desde los nutrientes esenciales a sus efectos antinflamatorios y a la prevención del cáncer, esta fruta puede ayudar a mejorar y preservar nuestra salud.
Las granadas son frutas clasificadas como bayas. Cada pieza de esta fruta tiene un diámetro de aproximadamente 5-12 cm, es redonda y roja, y tiene un tallo en forma de flor. La piel no es comestible y es difícil de atravesar, pero las semillas dentro de la fruta son comestibles y contienen una gran parte de los beneficios.
La granada no solo es una fruta deliciosa, sino que también es una fruta llena de beneficios para la salud que han sido respaldados por los médicos. Incluso el jugo de granada está lleno de beneficios, en algunos casos, en cantidades más significativas que en la fruta entera.
12 beneficios probados de la granada
Nutrientes esenciales:
Una taza contiene: 7 gramos de fibra; 3 gramos de proteína; 30% de la cantidad diaria recomendada de vitamina C; 36% del valor diario recomendado de vitamina K; 16% de la cantidad diaria recomendada de ácido fólico; 12% de la cantidad diaria recomendada de potasio
Las granadas alientan una respuesta antiinflamatoria en el cuerpo:
La inflamación crónica puede conducir a muchas enfermedades graves, como enfermedades cardíacas, cáncer, diabetes (tipo 2), enfermedad de Alzheimer, obesidad y muchas otras afecciones. Las granadas tienen una alta propiedad antiinflamatoria. La investigación muestra que la capacidad de esta fruta para reducir la inflamación en el cuerpo supera con creces muchos otros remedios antiinflamatorios.
Pueden ayudar a prevenir o reducir el riesgo de cáncer:
La incorporación de granadas en su dieta podría reducir significativamente el riesgo de cáncer de colon, cáncer de mama y cáncer de próstata. El crecimiento de las células cancerosas puede ralentizarse considerablemente al consumir regularmente jugo de granada. Esto sucede debido a las propiedades antiinflamatorias y antiangiogénicas de la fruta, lo que evita que las células cancerosas o los tumores encuentren un suministro de sangre.
La fruta puede ayudar a normalizar la presión arterial:
La oxidación de LDL conduce a una acumulación de placa en su cuerpo, y esta fruta reduce la oxidación de LDL. Evita que se acumule placa y también ayuda a eliminar la placa que ya ha comenzado a formarse.
Las granadas pueden ayudar a tratar la artritis u otro dolor conjunto:
Este tratamiento se debe principalmente a las propiedades antiinflamatorias que se encuentran en la fruta. La artritis y el dolor en las articulaciones pueden ser debilitantes si empeora lo suficiente, y se ha descubierto que las granadas alivian el dolor causado por la inflamación con bastante rapidez. También hay menos incidentes de dolor reportados por aquellos que consumen la fruta regularmente.
Es esencial mencionar que la fruta también impide que las enzimas dañinas lleguen a las articulaciones, previniendo y retrasando la aparición de la osteoartritis.
Puede reducir su riesgo de desarrollar la enfermedad del corazón:
La salud cardiovascular mejora cuando las granadas se incorporan regularmente en la dieta. Al regular la presión arterial, reducir y prevenir la acumulación de placa, y los otros beneficios para la salud de la granada, el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón (el asesino número uno en los Estados Unidos) disminuye significativamente.
Sirven como un tratamiento natural para la disfunción eréctil:
Dado que esta fruta estimula el flujo sanguíneo en todo el cuerpo y la disfunción eréctil es causada principalmente por el daño oxidativo (que es lo que crea un flujo sanguíneo deficiente), solo tiene sentido que las granadas puedan tratar el problema. Los estudios sugieren que el consumo regular de granadas en alguna forma trata la DE.
Las infecciones bacterianas y fungales pueden ser tratadas o prevenidas consumiendo granadas:
Consumir granadas regularmente puede ayudar a tratar infecciones bacterianas, fúngicas y virales. Esta fruta puede estimular los probióticos naturales en el cuerpo, que trabajan para combatir y prevenir infecciones. Además, las granadas trabajan muy duro para luchar contra la levadura presente en el cuerpo.
Esto también se aplica a la salud oral, ya que el consumo de granadas puede prevenir y tratar la gingivitis y la periodontitis.
Puede mejorar la memoria:
Las semillas de las granadas contienen grandes cantidades de polifenoles, que han demostrado ayudar a retener la memoria. Otros estudios han demostrado que ayuda a los ancianos que tienen problemas de memoria y puede retrasar la aparición de la enfermedad de Alzheimer.
El consumo de granadas puede
conducir a mejores sesiones de ejercicio:
Los nitratos en la dieta son necesarios para un rendimiento de ejercicio
eficiente, y las granadas contienen altas cantidades de ellos. Los estudios
muestran que consumir la fruta unos 30 minutos antes del ejercicio mejora significativamente
el rendimiento.
El jugo de granada contiene antioxidantes:
Encontrado en el jugo de granada, la punicalagina es un potente antioxidante que tiene casi tres veces la cantidad de antioxidantes que se encuentran en el vino tinto, el té verde y muchas otras fuentes populares de antioxidantes.
Ayuda a curar la anemia:
Las granadas contienen una gran cantidad de hierro, revirtiendo la anemia y previniéndola en el futuro. También ayuda a estimular el flujo sanguíneo a través del cuerpo, lo que también ayuda con la anemia.
La granada ha demostrado ser uno de los alimentos más saludables en la tierra. Los muchos nutrientes y otros beneficios lo convierten en una fruta que no se puede dejar pasar. Si no eras fanático antes, prueba algunas formas nuevas de incluir granadas en tu dieta para que puedas cosechar los beneficios.
