Entre 2011 y 2016 el país perdió casi 2 millones de hectáreas de bosques. Se arriesga la desertificación en la Región Occidental.
La deforestación en Paraguay ha dejado de ser un problema solo de la Región Oriental y se ha extendido a la Región Occidental, con graves riesgos para el equilibrio ambiente. La falta de normativa específica estaría conspirando para la ampliación de las áreas deforestadas en la zona oeste del país.
Un informe del Instituto Forestal Nacional (INFONA) lanza esta semana una luz de alerta sobre el fenómeno: entre 2011 y 2016 la Región Occidental ha perdido casi 2 millones de hectáreas forestadas, y en la casi totalidad de los casos la deforestación fue autorizada. Desde el Instituto Forestal se señala que los que deforestaron para convertir para uso ganadero esa tierra tenían en el 97% de los casos el permiso para hacerlo.
Las dos regiones del país presentan características muy diferentes: la reposición de árboles en el Región Oriental es asombrosamente más fácil que en la Occidental, donde el riesgo es la desertificación de los territorios. Sin embargo, pese a la normativa que protege el este del país, entre 2012 y 2016 se perdieron más de 300 mil hectáreas de bosques, con frecuencia en modo ilegal, más de 16.000 hectáreas el año pasado.
La ley que protege la Región Oriental de la deforestación, es de 2004. En 2002 se había constatado que de mantenerse el ritmo de pérdidas de bosques (120 mil hectáreas por año), en cinco años estos podrían desaparecer. La ley no protegió el Chaco paraguayo. Por ello, desde INFONA se trabaja con los agricultores y con quienes tengan tierra y se señala la necesidad de un ordenamiento del territorio que delimite las zonas de alto valor para la conservación. En 2016 el Chaco ha perdido más de 200 mil hectáreas de bosques, en los años anteriores se deforestó a un ritmo de más de 300 mil hectáreas al año.