En el aeropuerto lo esperaban decenas de embajadores en el país y varios organismos internacionales. El opositor convocó a una manifestación callejera para este sábado.
El jefe del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, autoproclamado presidente interino de Venezuela y reconocido por unos 50 gobiernos llamó este lunes a una reunión con varios sindicatos y convocó a una manifestación callejera el próximo sábado en contra de la “dictadura” de Nicolás Maduro.
Guaidó regresó al país por el aeropuerto internacional de Caracas y frente a miles de simpatizantes encabezó su primer acto público una hora después, tras una gira que lo llevó por Colombia, Brasil, Paraguay, Argentina y Ecuador; donde fue recibido con honores de jefe de Estado. La gira comenzó luego de que fracasara el intento de hacer ingresar ayuda humanitaria desde la frontera con Colombia.
Desde una tarima en el este de Caracas, Guaidó adelantó que prevé encontrarse el martes con trabajadores públicos para tomar decisiones enmarcadas en su objetivo de cesar “el secuestro de la burocracia” por parte de la llamada revolución bolivariana.
“Mañana reunión importante con todos los sindicatos de empleados públicos, no podemos permitir que la burocracia siga secuestrada, que usen a nuestros empleados públicos que hoy no ganan bien (…), llegó el momento de decir ya basta, llegó el momento de dejar sin funcionamiento a ese régimen que los oprime”, sostuvo.
Guaidó también señaló que en las manifestaciones del sábado los ciudadanos volverán a las calles de Venezuela “decidida y determinadamente para movilizarse en búsqueda de su libertad”.
“No nos quedaremos ni un segundo tranquilos hasta lograr la libertad de Venezuela”, agregó sin mayores detalles sobre esta actividad.
El líder de la Cámara, que considera al presidente Nicolás Maduro un usurpador, agradeció el apoyo que recibió por parte de una decena de embajadores de varios embajadores que acudieron al aeropuerto para recibirlo y dificultar su arresto, como había prometido el presidente Maduro. Guaídó tenía orden judicial de no abandonar el país. El opositor mantuvo en secreto la forma en la que regresaría ante la posibilidad de ser encarcelado. “Nos amenazaron y seguimos aquí (…) claro que vamos a poder Venezuela”, apuntó al respecto.
Además de los embajadores, varios organismos internacionales estuvieron a la espera de la llegada de Guaidó por el caso de que fuera detenido. El legislador también anunció que en los próximos días se van a incrementar algunas sanciones contra el Gobierno de Maduro por parte de algunos países, y aseguró que ya hay más de 700 oficiales activos que se acogieron a la Ley de Amnistía.