El 20 de junio es el día de la bandera. En 1867, aquel feriado tuvo lugar un jueves. Ese día, un grupo de jóvenes británicos y criollos disputaba el primer partido de fútbol en tierras argentinas.
La competencia había sido pactada originalmente para el 25 de mayo, pero la lluvia de aquella fecha patria obligó a postergar el match hasta el siguiente feriado, que tuvo lugar el día de la bandera.
La cita fue en los bosques de Palermo, cerca del actual Planetario porteño. La convocatoria se había fijado para el mediodía.
El encuentro se extendió por dos horas. Los contrincantes no se diferenciaban por las camisetas, sino por el color de sus cabezas: ganaron las boinas rojas, por un abultado marcador: cuatro a cero.
Ambos equipos aplaudieron cada gol, en un ejemplo de comportamiento deportivo que por estos días suena a ficción.
El numeroso público que se dio cita para conocer el novedoso deporte no comprendía cabalmente las reglas de juego, pero todos los jugadores y espectadores en aquel feriado futbolero, siguieron atentamente la marcha de la pelota, tal como nos lo relata el cantautor Alejandro del Prado …