Era delegado episcopal de la Comisión Nacional de Pastoral de Adicciones y Drogadependencia de la Conferencia Episcopal Argentina. Aquí, unas palabras de despedida de quienes han caminado junto a él en esta importante labor.
Anoche conocimos la noticia. Nos tomó en oración por su vida y su entrega por los “changos”. Una tensión de oración que se expresó durante todo el tiempo de su enfermedad.
Su paso por nuestra Comisión fue corto como delegado episcopal y muy largo como miembro comprometido. Pudimos experimentar su paternidad, su sencillez y sus respuestas inmediatas ante cualquier situación a resolver. Su teléfono siempre estaba listo para atender. Y eso hizo la diferencia.
En la única homilía que él predicó reunidos como Comisión de modo presencial nos hizo tocar fondo al mostrarnos la carne llagada de Jesús en aquel noviembre de 2019. Y nos indicó el abrazo como respuesta, la verdad como consigna, la mirada siempre buscando al hermano roto:
“Todas estas cosas que nos sacuden, escandalizan, son un llamado a amar de verdad. Todo esto tiene que ser para que den testimonio de mí, dice Jesús. Qué lindo llamado. Por eso dice Jesús: no se alarmen. No digan que esto es el ‘acabose’. Como decía Mafalda: ‘esto no es el acabose, señor, es el empezose’. Esta es la invitación que nos está haciendo la historia. Nos hace falta una mirada profética”.
Que este profeta que es Jesús nos haga abrir los ojos y que nosotros también lo seamos, los obispos, los curas, los laicos, todo el pueblo de Dios. Como decía Moisés: “ojalá todo el pueblo profetizara”.
Querido padre Melitón: esto es tu “empezose” junto al Padre.
Padre Obispo Fernando Maletti
Padre José María Di Paola
Y toda la Comisión Nacional de Pastoral de Adicciones y Drogadependencia
Conferencia Episcopal Argentina
26 de mayo 2021