Será este domingo 18 de noviembre.
Con el lema “Este pobre grita y el Señor lo escucha”, el domingo 18 de noviembre se celebrará la segunda Jornada Mundial de los Pobres, instituida por el papa Francisco al final del Jubileo de la Misericordia. Dicha jornada llama a toda la comunidad cristiana a tender la propia mano a los débiles y a los hombres y mujeres cuya dignidad es pisoteada.
El Santo Padre celebrará la Eucaristía a las 10 en la Plaza San Pedro, ante la presencia de más de cuatro mil fieles, entre ellos personas sin techo y de bajos recursos, acompañados por el personal de las asociaciones de voluntariado que se ocupan de ellas en Roma y en otras diócesis del mundo. Al término de la misa, unos 1500 indigentes almorzarán junto al Papa en el Aula Pablo VI del Vaticano.
El Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, organizará diversas actividades durante la jornada, comenzando con una vigilia de oración el sábado 17 por la tarde, en la basílica de San Lorenzo extra muros.
Cáritas Roma instalará el comedor de la Ciudadela de la Caridad – Santa Jacinta, y, en el comedor San Juan Pablo II de vía Marsala, más de 300 huéspedes de diferentes diócesis participarán en la celebración con el Papa.
Por la tarde, se realizará el musical “Hijos de Judas”, en el Teatro del Seminario Romano Mayor, espectáculo obra del grupo “I SognAttori” de la parroquia San Judas Tadeo.
El mensaje del Papa
En su mensaje para esta II Jornada Mundial de los Pobres, que se celebra anualmente en el penúltimo domingo del año litúrgico, el papa Francisco alertó sobre las “consecuencias sociales dramáticas” de la pobreza.
“¿Cuántos caminos conducen a formas de precariedad? La falta de medios elementales de subsistencia, la marginalidad cuando se deja de estar en pleno de las propias fuerzas de trabajo, las diversas formas de esclavitud social, a pesar de los progresos llevados a cabo por la humanidad”, destacó el Pontífice en el texto para la celebración del 18 de noviembre.
Francisco subrayó que la pobreza no es buscada, sino que es “creada por el egoísmo, la soberbia, la avidez y la injusticia”, invitando a todos a un “serio examen de conciencia”.
El mensaje, además, critica la “aversión a los pobres” manifestada por algunos sectores de la sociedad, que los consideran “no sólo como personas indigentes, sino también como gente que trae inseguridad, inestabilidad, desorientación de las actividades diarias y, por eso, gente que debe ser rechazada y mantenida a lo lejos”.
Fuente: AICA