¿Cuándo se originó el diaconado en la Iglesia?
El origen histórico tal vez nos lo narra el Libro de los Hechos de los Apóstoles (6,1-6); pero en realidad los cristianos que creemos que Jesús mismo instituyó los sacramentos debemos volver a las prácticas y enseñanzas del Señor para rastrear el origen del diaconado y para volver a animarlo y redimensionarlo cristiananmente.
La Iglesia es casa de todos y cosa de todos, los cambios se dan desde adentro y en la medida que sean animados por la Palabra de Dios, serán cambios de auténtica conversión. para el bien de muchos.
Sobre el autor
Gerardo García Helder, argentino de 60 años, Magister en Sagradas Escrituras (Inst. Univ. ISEDET), Licenciado en Psicología (UBA) y Operador Socioterapéutico en el campo de las toxicodependencias (Progetto Uomo – Roma – Italia), cursando seminarios doctorales en el IIEGE – UBA en vista a un Doctorado en Estudios de Género.
Ha sido elegido ininterrumpidamente desde hace 30 años Presidente de la Fundación Amistad, Misericordia y Comprensión y es Director de la Editorial AMICO y del periódico “Diálogo” (dependientes de dicha Fundación). Miembro de la Asociación Bíblica Argentina (ABA). Director del Departamento Nacional de Animación y Pastoral Bíblica de la Conferencia Episcopal Argentina. De 2013 a 2018 fue Coordinador Zonal Cono Sur (Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay) de la Federación Bíblica Católica (FEBIC) y miembro del Comité Ejecutivo Regional de América Latina y El Caribe (FEBIC LAC) de la FEBIC. Responsable del sitio RABI (Red Argentina Bíblica) en Facebook. Miembro del Consejo de Redacción de “ETIAM. Revista Agustiniana de Pensamiento”. Hace años dicta ejercicios espirituales, cursos y conferencias en distintos lugares de América Latina sobre temáticas religiosas y espiritualidad. Escribió “Diccionario de Liturgia”, “Mandalas Cristianos”, “ABC de San Agustín”, “Les he lavado los pies: hagan ustedes lo mismo”, “Los dones del Espíritu Santo” y cientos de libros devocionales y materiales catequísticos para niños y jóvenes. Tradujo algunas obras de san Agustín de Hipona y de teólogos contemporáneos al español.