El arzobispo ortodoxo sirio y el arzobispo griego ortodoxo fueron interceptados por hombres armados en abril de 2013 y desde entonces permanecen cautivos.
El Comité Central del Consejo Mundial de Iglesias ha reiterado su preocupación por la situación alarmante y en rápido deterioro de los cristianos en Medio Oriente. Además, el Comité Central pidió la liberación de dos arzobispos sirios que fueron secuestrados cerca de Alepo (Siria) y siguen siendo cautivos desde hace cinco años.
Los dos líderes religiosos, el arzobispo ortodoxo sirio Yohanna Ibrahim y el arzobispo griego ortodoxo Paul Yazigi (foto), fueron secuestrados por hombres armados en abril de 2013, cuando regresaban desde la frontera turca a su ciudad de Alepo.
“El Comité Central recuerda con pesar el secuestro, hace cinco años, de los arzobispos de Alepo, Youhanna Ibrahim y Paul Yazigi”, dice el comunicado. “Seguimos orando por su regreso seguro a sus iglesias, comunidades y familias, como un signo de esperanza para todos los cristianos de Siria y de la región”.
La declaración también afirma que “se necesita un nuevo pacto social en toda la región de Oriente Medio, un discurso común articulado y compartido por todas las comunidades de los países de la región, basado en una interpretación incluyente de la ciudadanía y de los derechos humanos –garantizados constitucionalmente– y en virtud del cual todas las iglesias y comunidades religiosas, con sus diversas identidades étnicas, religiosas y culturales, puedan vivir y prosperar en el amor y la gracia que Dios da a todos”.