Los arqueólogos han encontrado la tumba en una localidad real que antiguamente controlaba las rutas comerciales.
Uno de los mayores sitios arqueológicos maya se ubica en el norte de Guatemala y se ubica en Tikal, en el Parque Nacional Laguna del Tigre. A unos 40 km de este sitio está Perú-Waká, una ciudad real desde donde se controlaban las rutas comerciales importantes que corrían del norte al sur y del este al oeste. Se cree que una de las primeras dinastías mayas conocidas, la Wak (ciempiés en maya), se estableció en el siglo II de nuestra era.
Un descubrimiento realizado por arqueólogos guatemaltecos del Proyecto Arqueológico Waká, revelan que una tumba de un gobernante maya excavada en la ciudad maya y conocida como Tumba 80, data de los primeros años de esta dinastía real.
El gobernante ha sido identificado como un hombre maduro. Y aunque permanece anónimo, porque no estaba acompañado por artefactos inscritos, el equipo sugiere que pudo haber sido el rey Te ‘Chan Ahk, un monarca Wak conocido históricamente, que gobernó en el siglo IV. El sepulcro ha sido provisionalmente fechado por análisis cerámicos entre el 300-350 d.C., convirtiéndola en la tumba real más antigua descubierta en el sitio, con unos 1.700 años.
El hallazgo fue presentado en un simposio patrocinado por el Ministerio de Cultura de Guatemala. La identificación de la tumba como real se basa en la presencia de una máscara de retrato de jade con una lengüeta en la frente que tiene un símbolo único de la cruz griega que significa amarillo y precioso en maya antiguo. Este símbolo está asociado con el Dios del Maíz, que era como se retrataba habitualmente a los reyes mayas, equiparándolo con él.
En el hallazgo también aparecieron 22 recipientes de cerámica, conchas de Spondylus, adornos de jade y un colgante de concha tallado como un cocodrilo. Algunos adornos como la máscara de retrato fueron pintados de rojo brillante. Una investigación anterior en el sitio había revelado seis tumbas reales y los sacrificios que ofrecen los entierros que datan de los siglos V, VI y VII.
Un escaneo en 3D de alta tecnología llamada LIDAR, permitió el descubrimiento en Guatemala una red de linderos que funcionaron como senderos y conectaron alguna vez pirámides maya. El alcance de la red coloca a esta civilización al nivel de la romana, por el tejido urbano de sus asentamientos.
Fuente: NMas1