A los 60 años ha sido el único que consiguió tres Oscar de la Academia como mejor actor.
Daniel Day-Lewis se retira del mundo del cine. A los 60 años, sin poses de estrella, sin figurar en el mundo del glamour, este actor británico hace años que nos regala actuaciones magistrales. Performances que le han valido tres premios Oscar como mejor actor, el único que hasta ahora haya logrado tanto.
El comunicado difundido por su vocera no da mayores explicaciones y sólo anuncia que “no trabajará más como actor. Está inmensamente agradecido a todos sus colaboradores y a todo el público durante todos estos años. Esta es una decisión personal y ni él ni sus representantes harán más comentarios al respecto”.
La pantalla grande extrañará al intérprete de Mi pie izquierdo, un filme entrañable en el que personificó a un tetraplégico, de la conflictiva figura del protagonista del En el nombre del padre y más recientemente del presidente de los Estados Unidos Abraham Lincoln. Sus directores han sido figuras distinguidas como Jim Sheridan, Martín Scorsese, Steven Spielberg.
Su tercera estatuilla como mejor actor, Day-Lewis la obtuvo con Pozos de ambición, una dura película sobre el auge del petróleo en los Estados Unidos. Pero lo recordamos sobresalir en The boxer, La edad de la inocencia, Nine, El Crisol, o en la versión cinematográfica de la famosa novela El último mohicano.
Tendremos modo de admirarlo en su última labor: Phantom Thread, del director Paul Thomas Anderson, sobre el mundo de la moda en la década de 1950.
Ha sido un actor meticuloso, que se ha entregado con destacada profesionalidad a su labor al punto que su ausencia empobrecerá sin duda el séptimo arte. Quiere descansar, parece, y dedicarse a la vida familiar: está casado con la cineasta Rebecca Miller, con la que tiene tres hijos.
¡Gracias Daniel!
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