Brasil es el país más inseguro del mundo para los defensores de la Tierra. Siguen Colombia, Filipinas y México.
Casi 200 defensores de la Tierra y del medio ambiente fueron asesinados en 2017 en América Latina. El dato proviene del informe publicado por Global Witness, siguiendo proyecto realizado en alianza con el diario The Guardian.
En el documento se destaca que 197 activistas fueron muertos el año pasado en el mundo por enfrentar a gobiernos y empresas que robaron sus tierras, dañaron el medio ambiente, y por denunciar las prácticas corruptas e injustas que lo permitieron.
El promedio es de casi cuatro crímenes de activistas cada semana. El saldo de 2017 es cuatro veces superior al registrado en 2002, el primer año en que se publicó. A esta estadística, sin embargo, cabría agregar los intentos fallidos, las amenazas, el hostigamiento además de los casos en que los activistas fueron heridos.
El informe señala que los defensores del medio ambiente se encuentran en las primeras líneas de un campo de batalla global, enfrentando en diversos lugares del planeta las mismas amenazas en sus luchas contra minas, plantaciones, proyectos de infraestructura y comerciantes ilegales.
Brasil se mantiene como el país más mortal para ese sector, con 46 crímenes, seguido por Colombia con 32. Filipinas fue la nación más letal de Asia con 41 muertes. En el cuarto lugar está México con saldo de 15 asesinatos en 2017 (cifra cuatro veces superior a la de 2016). En África, la República Democrática del Congo fue el peor caso.
Entre los episodios específicos, el informe señala el ejemplo del mexicano Isidro Baldenegro, ganador del Premio Goldman de Medio Ambiente, quien fue asesinado por criticar la tala ilegal de bosques antiguos en el país. Baldenegro fue el segundo galardonado Goldman en ser asesinado, después de la hondureña Berta Cáceres, un año antes.
Esto es fruto de la codicia, pero sobre todo la indiferencia. La indiferencia es la peor omisión que de pueda cometer. A mi no me pasa y yo no me meto. Agreguemos el argumento “para que se metieron, algo habrán hecho” o es peligroso meterse. Mucho más peligrosa es la indiferencia.¿Ojala fueras frío o caliente! ….pero como eres tibio y no frío o caliente te vomitaré de mi boca Ap 3 (15,16)