La medida se pondrá en práctica en agosto y será gestionada por la Anses. Se reconocerán uno, dos o tres años de aportes por cada hijo.
“La propuesta contribuye en el corto plazo a resolver los problemas de acceso al sistema previsional en una determinada población, y a visibilizar el cuidado como un trabajo fundamental para la sociedad”, valora el documento del Cippec “Los regímenes previsionales de excepción en Argentina”. El informe advierte que la utilización de este mecanismo de compensación retroactivo no permite interrumpir las inequidades en la vida laboral, y perjudica la sostenibilidad del sistema”.
El documento recalca que las mujeres deben ser reconocidas como las principales responsables de las tareas de cuidado, y destaca que si la medida “se mantuviera exclusivamente para las mujeres, a la larga podría generar incentivos no deseados en favor de la feminización del cuidado”. En el caso de las licencias, la tendencia en muchos lugares del mundo es incentivar a que sean compartidas entre los padres.
Para la abogada previsionalista Andrea Falcone la medida es correcta desde el aspecto de la inclusión, incorrecta desde la perspectiva de género, e insuficiente por la falta de una política de fondo para el problema de la no creación de empleo formal. Acentúa el estereotipo de mujer madre y mujer cuidadora. Señala que en España hay un derecho a aportes por hijos que vale para mujeres y varones.
En la Argentina hay un reconocimiento por tareas no remuneradas o del hogar implícito en la edad jubilatoria, de 60 años para mujeres y de 65 años para varones. En un debate amplio debería incluirse, dice, la igualación de la edad, según Adrián Tróccoli. “El reconocimiento por hijos surgió en países que buscaron incentivar la natalidad, por tener invertida la pirámide poblacional”.
Fuentes:
https://tinyurl.com/CnCambiosPrevisionales
https://www.cippec.org/publicacion/los-regimenes-previsionales-de-excepcion-en-argentina/