El presidente Evo Morales promulgará la ley que deroga la intangibilidad de este territorio protegido. Se oponen comunidades indígenas y ambientalistas.
La ley que deroga la intangibilidad del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), para que sea atravesado por carreteras, ha suscitado un intenso debate en el país. La derogación ha sido votada por el oficialismo en el parlamento boliviano y la ley será promulgada este fin de semana por el presidente Evo Morales, con el apoyo de sectores sociales e indígenas a favor de la iniciativa.
Las consultas realizadas en estos años, pues el debate es largo, han dado resultados dispares, con grupos indígenas a favor y en contra.
Si los impulsores aseguran que la nueva ley llevará progreso a la reserva y sus detractores alertan de daños ambientales y crecimiento del narcotráfico.
De hecho, junto con opositores políticos, otros sectores sociales, indígenas y ambientalistas se oponen a la modificación del status de este territorio por considerar que afecta a la biodiversidad, a la preservación del patrimonio ambiental y sigue los intereses de los productores de hoja de coca (cocaleros).
Tres las opciones que se están analizando en defensa del TIPNIS: un recurso de inconstitucionalidad, pedir un referéndum nacional y convocar a una décima marcha indígena.
La Central de Pueblos Étnicos Mojeños del Beni (CPEM-B) realizará este viernes una asamblea en la que se prevé definir una convocatoria para la una nueva marcha indígena, y se analizarán los mecanismos para promover un referéndum nacional respecto al proyecto carretero entre Villa Tunari y San Ignacio de Moxos. “El pueblo mojeño lo decidió, si es necesario llegar a La Paz con una marcha, lo vamos a hacer. Eso vamos a definir mañana (viernes)”, anunció Mole en una conferencia de prensa que brindó en la sede de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia en La Paz.
En Cochabamba hubo anoche una movilización de activistas que se oponen a la nueva ley y en Santa Cruz habrá una marcha esta tarde.