Muchas veces necesitamos una buena idea para acompañar un plato principal de carne, ave o pescado.
Esta vez, quiero sugerirles un recurso fácil y barato, además de liviano. Para prepararlo, podemos utilizar, para cuatro personas, un par de berenjenas grandes y un par de zapallitos largos (también se usa la expresión zucchini o zapallitos italianos). Cortarlos en rodajas de más o menos medio centímetro de espesor. Mientras tanto, calentar al fuego una buena sartén y cuando esté bien caliente solo untarla con aceite de girasol. La idea es que el calor de la sartén cocine las hortalizas sin freírlas, por lo tanto, mucha parsimonia con el aceite. Cuando la sartén esté demasiado seca, volver a untar. Disponer de las berenjenas y cuando ya se ponen más oscuras darles vuelta. A medida que las retiran, disponerlas en una fuente o un plato junto con ajo picado, y espolvorear según el gusto orégano o albahaca o perejil picado. Luego se hará lo mismo con los zapallitos largos (por eso será importante que sean de gran tamaño, si no se vuelve larga la preparación). Quizás se puede elegir el perejil con los zapallitos largos y el orégano o la albahaca con la berenjena. Otra variante de especia que pude usarse, creo yo sobre todo con las berenjenas, es la menta. Pero tengan presente que es todo cuestión de gusto, porque también está el tomillo, el eneldo… Si les gusta, pueden añadir un chorrito de vinagre o aceto balsámico. Y pueden agregar más aceite (si tienen, puede ser de oliva). Verán que el aceite, el vinagre, el ajo, las berenjenas, los zapallitos largos y las especias se fundirán en un concierto de sabores realmente agradables.
Dejen enfriar y luego utilicen el acompañamiento con el plato de carne.