Argentina cayó 3 a 0 ante Croacia y puso en jaque la clasificación a los octavos de final del Mundial. Un equipo apagado y reacción.
La única esperanza de Argentina es Lionel Messi. Y si el capitán está apagado nada es posible. La Selección Nacional es un equipo más, que llegó al Mundial por la ventana y sin un proyecto serio, elaborado en el tiempo. Todo lo contrario, clasificó a los tumbos y padeciendo los desbarajustes de una dirigencia incompetente.
Claro que cuando empieza a rodar la pelota la responsabilidad pasa a los jugadores y al cuerpo técnico. Y el plantel nunca encontró respuestas para estar a la altura de una competencia de altísimo nivel como es un Mundial. Ni ante Islandia ni ante Croacia.
Es un equipo al que todo le cuesta. Ya sea defender como atacar. Y si encima se cometen errores como el del arquero Wilfredo Caballero, que la pifió al intentar jugar con los pies la pelota y se la regaló al delantero croata para que estampara el 1 a 0, todo se hace cuesta arriba.
Es un grupo que no se muestra con confianza y un golpe certero como el ocurrido al comienzo del segundo tiempo lo desmorona. A partir de allí no hubo ideas, ni dentro del campo ni desde el banco de suplentes, para dar vuelta la historia. El desconcierto se volvió un rival más y Croacia lo aprovechó para estirar la ventaja y apabullar 3 a 0 a una Selección que llegó a Rusia con dudas y ahora no sólo sigue conviviendo con ellas sino con el enorme riesgo de quedar eliminada en primera ronda.
Argentina cuenta aún con una mínima chance. Ya no depende pura y exclusivamente de sí misma y estará atento a lo que suceda mañana entre Islandia y Nigeria. Pero por lo visto hasta el momento, de nada sirve hacer cuentas y especular con resultados si la propia selección albiceleste no encuentra el rumbo hacia el arco rival.
Desde 2016 hacia acá las decisiones instituciones han empujado a la Selección hacia un abismo. Hoy se encuentra a un paso del precipicio. No es para sorprenderse. Pero hay miedo, mucho miedo. Y ni el mejor del mundo parece tener el truco para sortear semejante dificultad. El martes se sabrá cuál es el destino de la Argentina.