Los mandatarios de Nicaragua y Bolivia con los sueldos más bajos, entre 3.200 y 3.300 dólares. El de Guatemala recibe casi 20.000 dólares por mes.
¿Cuáles son los sueldos de los mandatarios de América Latina? ¿Están de acuerdo con la necesaria austeridad y con el nivel económico del resto de sus conciudadanos? Un análisis a fondo de hasta qué punto se justifican estas remuneraciones (a las que hay que añadir la cobertura de otros gastos, como el del mantenimiento diario, los traslados, la asignación de una residencia, etc.) es posible considerando la realidad de cada país.
Los números dicen que actualmente, el sueldo más elevado es el del presidente de Guatemala, Jimmy Morales, quien recibe 19.300 dólares por mes, lo que es equivalente a 50 veces el salario mínimo en su país, habiendo sido fijado este último en 393 dólares.
Le siguen por orden la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, que recibe 14.900 al mes, y el mandatario de México, Enrique Peña Nieto, con un sueldo de 13.750 dólares. En Uruguay, el presidente Tabaré Vázquez, cuenta con un sueldo de 11.550 dólares, mientras que su par, el colombiano Juan Manuel Santos percibe 11.300 dólares, que es una asignación básica igual a la que reciben los miembros del Congreso, a la que se añade el doble de los gastos de representación de los legisladores. El presidente de la Argentina, Mauricio Macri, dispone de una remuneración de 10.885 dólares.
Muy por debajo de estos valores, el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, recibe 4.765 dólares mensuales. Una cifra que ha generado las protestas del propio presidente, que es además un conocido millonario, debido a que su cargo de presidente recibe la mitad del sueldo de un ministro. Otros dos secretarios de estado “ganan cuatro veces más que yo, ¿les parece justo?”, se quejó Kuczynski en octubre de 2016. El presidente hondureño Juan Orlando Hernández, recibe todavía menos: 4.160 dólares, y el venezolano Nicolás Maduro 4.068 dólares, equivalente a 12 salarios mínimos.
Los que menos ganan, son el presidente de Bolivia, Evo Morales, quien recién pudo obtener un aumento que llevó a 3.327 dólares su remuneración mensual y su colega de Nicaragua, Daniel Ortega, que reciben 3.200 dólares.
Aunque en muchos de estos países han aumentado los salarios mínimos profesionales en los últimos años, la brecha entre ricos y pobres sigue ampliándose. Según un informe presentado por la Universidad de La Sabana, Colombia tiene uno de los salarios más bajos de toda Latinoamérica, equivalente a 253 dólares mensuales. Según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), es el cuarto salario mínimo más bajo de América Latina y el Caribe. Le sigue el salario mínimo de Brasil, 212 dólares, el de México, 134, y Nicaragua, 122.
Bien lejos se ubica el salario mínimo de Panamá, 744 dólares, el de Costa Rica, 512, Argentina, 504, Chile, 415 dólares y Guatemala, 393, que tienen los mejores salarios mínimos de la región.