Un empresario de Dios con sangre obrera

Un empresario de Dios con sangre obrera

En el marco de un nuevo aniversario del fallecimiento del siervo de Dios Enrique Shaw, el pasado domingo 27 de agosto se realizó una santa misa presidida por el arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge Ignacio García Cuerva.

Concelebraron además el arzobispo emérito de Buenos Aires, cardenal Mario Poli; el obispo castrense de la Argentina y delegado episcopal de la Causa de los Santos, monseñor Santiago Olivera; el administrador apostólico de La Plata y secretario general del Episcopado, monseñor Alberto Bochatey OSA; el obispo emérito de Rafaela, monseñor Luis Fernández; el obispo emérito de San Rafael, Eduardo María Taussig, y el obispo auxiliar de Buenos Aires, vicario de la zona Belgrano, monseñor Alejandro Giorgi.

García Cuerva destacó en su homilía que Enrique Shaw “hubiera soñado con una patria de hermanos como así también que supo superar barreras con sus obreros”.

Asistieron sus hijos Sara y Juan Miguel, quien es sacerdote del Opus Dei desde hace 43 años y se encuentra desarrollando su tarea pastoral en África.

La ceremonia tuvo lugar en la basílica Nuestra Señora del Pilar de Recoleta, donde Enrique Shaw realizó su camino en la fe. Posteriormente, sus restos fueron trasladados a los pies del altar donde él rezaba.

Fotos: AICA

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