En el contexto de la celebración que tuvo lugar el pasado 5 de septiembre, compartimos una reflexión desde el norte de la Argentina.
“Aunque digan que ya no estoy, desde mis raíces volviendo estoy”. Así cantaban Ángela y Celia para decir presente no solo con sus coplas sino con su compromiso con la defensa de su cultura, de su identidad como comuneras de Amaicha del Valle, provincia de Tucumán. También estaba Aime, comunera de Tafí del Valle, una mujer joven que también con orgullo aprende cada día más para defender su cultura.
En el marco de la celebración del día la Mujer Indígena, en la Universidad Nacional de Tucumán, la Cátedra de Historia Indígena americana y extra americana de la carrera de Historia, Cátedra Libre de Pueblos Originarios, Instituto de Rescate y Revalorización del Patrimonio Cultural (CERPACU), Cátedra de Lingüística General II, Proyecto de investigación H647/3 “Memorias, identidad, interculturalidad y estado: estudios comparados”, se pusieron de acuerdo y prepararon la mesa para que, en la vida de estas tres mujeres, se pudiera rendir homenaje y reconocer la lucha por defensa de la cultura, de sus lenguas, de las formas de vivir en armonía con el cosmos, la naturaleza.
En la fortaleza de las mujeres se puede reconocer cómo a pesar de la discriminación popular y muchas veces institucional, su tozuda convicción y dedicación, a través del arte, la enseñanza intercultural, trabajando a la par con sus compañeros de vida logran conquistar nuevos espacios para que el patrimonio cultural no se pierda y la identidad se transmita de generación a generación.
Existen muchas leyes de reconocimiento intercultural que no son aplicadas, difidencia de la instrumentalización política de sus luchas, desafíos económicos después de la pandemia, pero lo mismo ellas siguen adelante. En sus historias se puede reconocer las de muchas, que como decía Aime “sin nosotras, nada es completo”.
Cuánto desconocimiento tenemos de las raíces, cuánto reconocimiento hace falta para que esas leyes aprobadas se conviertan en educación y salud intercultural…y no sólo. Que le podamos cambiar la letra a la copla y que puedan cantar: Ahora que estoy, con mis raíces, volviendo estamos.
Descubre más sobre este tema en la edición de agosto de la revista Ciudad Nueva, que nos invita a mirar y valorar la diversidad de las culturas de los pueblos originarios de nuestra región, un camino indispensable para construir una sociedad en la que todos tengamos lugar.
