Desde el colapso de la Unión Soviética, Rusia mantiene cierto resentimiento contra Ucrania, país independiente al que todavía considera como parte fundamental de su territorio. La Federación Rusa considera que la conquista de Ucrania es vital para la restauración de la denominada “Rusia histórica”.
El presidente ruso no escatima esfuerzos para promover un relato, absolutamente falso, de que los ucranianos y los rusos constituyen “una nación”. Putin desea fervientemente volver a reunir a los países de la antigua Unión Soviética y revertir lo que él llama “la mayor catástrofe geopolítica del siglo XX”. Su objetivo final es ‘corregir los errores’, de la caída de la URSS.
Habiendo declarado la Independencia en 1991, Ucrania eligió otra ruta: un camino independiente de desarrollo democrático, reforma e integración europea. Por el contrario, el Kremlin ha decidido seguir el camino de la conservación y la aspiración infundada de restaurar su imperio.
Desde el colapso de la Unión Soviética, el ritmo del cambio en algunas nuevas naciones de la región es diverso. Países como Bielorrusia han tratado de aferrarse a su herencia soviética; otros deseosos de cambios veloces, modificaron sus estructuras gubernamentales y políticas velozmente. Los estados bálticos y los países del antiguo Pacto de Varsovia hicieron caso omiso de su pasado soviético y tomaron medidas para integrarse a la OTAN y la UE a principios de la década de 1990, completando el proceso en 2004 , justo antes de que el imperialismo ruso comenzara a resurgir. Desafortunadamente, Ucrania y Georgia aún no habían completado ese camino para entonces. Ambos quedaron fuera de la comunidad euroatlántica, y ambos se convirtieron más tarde en objetivos de agresión militar por parte de Rusia, a costa de vidas y territorio.
Parece que los valores fundamentales y el ADN de la sociedad ucraniana -el amor por la libertad, la democracia, el libre pensamiento y los valores europeos son condenables para Putin; no puede comprender ni tolerarlos, por eso invade y busca destruirlos, literalmente.
Como resultado, la agresión militar y la violación total de todas las normas y leyes internacionales es lo único que Rusia puede proponer para alentar a los estados independientes a moverse dentro de la órbita del ‘mundo ruso’: su proyecto neoimperial.
Los numerosos intentos de Putin de presentar falsamente a Rusia como la “víctima que se defiende de un Occidente ‘agresivo'”, la expansión de la OTAN o los “nazis radicales que matan a ciudadanos de habla rusa” no tienen sentido y sirven como meras excusas para encubrir las actitudes agresivas de Putin.
Los motivos subyacentes de esta política son evidentes para comprender parte de las complejas e intrincadas acciones rusas: un país que cierra cualquier expresión de libertad nunca podrá entender, ni convivir pacíficamente con una nación vecina que representa la esencia misma de la libertad.
Fuente: https://war.ukraine.ua/why/
Excelente descripcion de los hechos….Ninguna explicacion de Rusia sera suficiente para justificar matar civiles, destruir hospitales obligar a miles de personas a escapar… nada , absolutamente nada, ninguna ideologia que valore el ser humano podra aceptarlo…
es la planificación magistral del servicio de inteligencia de los EEUU..
la guerra mediática y transformación sucede sin obstáculos ……
EEUU gana.!
europa pierde
ukrania pierde
rusia pierde.
buen trabajo agencia de inteligencia
Rezo por todos los que sufren la impiedad de esta guerra totalmente injusta.
Nadie puede justificar tal atropello a la libertad de un pueblo.
Sorprendidísimo de que se replique aquí este enfoque abiertamente parcializado. Veo como fuente una página ucraniana… Para presentar una nota marco que responda a la pregunta que figura en el título, hay que contrastar posiciones y consultar brevemente especialistas, en este caso, geopolíticos. Me parece preferible no publicar sobre el asunto si no hay posibilidad de encarar ese trabajo periodístico o replicarlo de otra.