Un proyecto digital “ayuda a enfocar” a los legisladores flamencos durante las sesiones.
Las sesiones de este Parlamento belga se transmiten por YouTube, y una aplicación que se puso en funcionamiento en julio de 2021, colabora para que no se distraigan. La aplicación es The Flemish Scrollers (los flamencos que hacen scroll). Esencialmente, etiqueta automáticamente a los políticos belgas cuando usan su teléfono en las transmisiones en vivo. Lo hace mediante herramientas de inteligencia artificial.
Funcionamiento
Cada reunión del gobierno flamenco en Bélgica se transmite en vivo en un canal de youtube . Cuando se inicia una transmisión en vivo, el software busca teléfonos e intenta identificar a un político distraído. Esto se hace con la ayuda de IA y reconocimiento facial. El video del político distraído luego se publica en una cuenta de Twitter e Instagram con el político etiquetado.
Software
El software está escrito en Python y utiliza el aprendizaje automático para detectar teléfonos y el reconocimiento facial para identificar al político. El software comenzó a ejecutarse el 5 de julio de 2021. Si no hay sesión, el software se ocupa de verificar los videos de antiguas sesiones cargadas en el canal de YouTube.
Software utilizado
Detección de objetos: Keras
Face Recognition: Keras
Twitter API
FFmpeg para edición de video con código
El proyecto pertenece a Dries Depoorter, artista visual belga que se especializó en ciertos usos de la inteligencia artificial. “Siempre me ha gustado mostrar el riesgo de la tecnología nueva y cómo nos sentimos ante ella”. El objetivo principal del proyecto es señalar los riesgos de los sistemas de vigilancia masiva. De hecho, en las respuestas a su tuit, muchos de los usuarios de la red social expresan su temor a que algo así se instaure como control de la ciudadanía. “Me pregunto si este tipo de cosas alertarán a los políticos de los peligros de la inteligencia artificial (IA) y el reconocimiento facial”, dice Andrew Stroehlein, director de comunicación para Europa de Human Rights Watch.
El software de Depoorter detecta cuando un político mira el celular desde su banca, pero no qué mira en el teléfono. Con un poco de análisis de cómo mueve los dedos y dónde miran sería relativamente sencillo intuir que tipo de aplicación usa. “Estoy trabajando en eso”, dice Depoorter. “Twitter e Instagram tienen un movimiento de arriba abajo. Es el siguiente paso y es posible hacerlo, pero debo probarlo. Escribir también puede ser una pista”, añade. Por supuesto, dar con quien juega dentro del recinto sería aún más fácil.
Depoorter ha cargado en el sistema las caras públicas de los diputados desde distintos ángulos para el reconocimiento facial. El software descarta las tablets y computadoras en manos de los diputados porque presume que son herramientas de trabajo. “En teoría pueden tomar notas en un celular también”, admite Depoorter.
En su debut, el proyecto detectó al menos a seis políticos con el celular, pero solo cuatro tienen su correspondiente tuit. Depoorter explicó que cuando no hubiera sesión el programa iría hacia atrás a sesiones anteriores para acumular políticos despistados, pero de momento no lo hace. Aunque finalmente el proyecto funcione bien, el sistema no podrá crear una clasificación rigurosa de diputados más distraídos porque el plano no es siempre el mismo, con lo que no puede garantizarse que todos los que miran el celular sean “escrachados”.
El mensaje para muchas personas que han visitado su última iniciativa es que los políticos son servidores públicos y lo mínimo que deberían hacer es estar atentos a lo que se cuentan unos a otros en el Parlamento.
A pesar de la distopía del proyecto, es interesante la parte de “cómo nos sentimos ante esta nueva tecnología”, en palabras de Depoorter. Viendo la reacción de cientos de personas en Twitter, la conclusión es que estas cosas son maravillosas, siempre y cuando “atrapen” a otros.
Fuentes: